Creo que ya he comentado en alguna ocasión que muchos viernes por la tarde salgo del curreles cual torete que salta a la Plaza de las Ventas y me piro a la tienda de cómics corriendo más veloz que lo que tardaron los reyes en organizar la boda del príncipe cuando se enteraron de que Doña Leticia iba ya «más follá que Fernando Alonso». El caso es que aparte de mis compras fijas del mes me gusta echar un vistazo a cosillas que en principio no me llaman la atención cuando las veo en los catálogos de novedades, pero que cuando las echo un vistazo allí en la tienda me deslumbran más que a un gilipollas al que le estalla un petardo en la cara…
Como sabéis, esto de los Lunes Molones comenzó hace ya unos años cuando los creadores de este humilde blog planteamos quedar todos los lunes y vernos una peli mientras nos poníamos todo cerdacos comiendo bollos y bolsas de patatas sin parar. La mecánica es simple: uno de nosotros elige algo que ver y el otro tiene que hacer su reseña. No sé que le pasa al Sr Grifter últimamente, quizás tenga algo personal contra mí, pero sus elecciones empiezan a rayar ya la ponzoña.
Estaba cantado que Sony iba a presentar su nueva consola en el Playstation Meeting 2013 que tuvo lugar ayer en Nueva York. Con ello la empresa nipona se abre camino hacia las consolas de nueva generación. No se vio nada del aspecto de la Playstation 4 (Sony mantiene la nomenclatura de sus consolas de sobremesa), salvo el nuevo mando Dualshock 4, el cual, como cualidad más destacable, incluye un panel táctil en lugar de los botones Select y Start.
