El sábado por la mañana estuve con mis colegas Kikales y Miguelón dando una vueltecilla por el centro, mirando por las tiendas de cómics y por el Fnac. Echando un vistazo en los estantes de música de este último sitio me llevé una grata sorpresa, pues vi un dvd de Elvis tirado de precio (estaba rebajado de 32 a 8,95€). El dvd en cuestión es la edición de lujo del 68 Comeback Special, que supuso un resurgimiento en la carrera del Rey del Rock. Tengo que comentar al respecto que yo tenía una edición que recogía parte de este especial, que me compré hace ya la tira de años en VHS, pero como ya no tengo vídeo pues me interesaba hacerme con esta edición ampliada en dvd.
Pasando a comentar ya lo que es el contenido de este dvd, hay que decir que tuvo lugar el 3 de diciembre de 1968.
Por aquel entonces el bueno de Elvis era, musicalmente hablando, casi un reflejo apagado de lo había sido diez años atrás (había centrado su carrera en realizar películas de ínfima calidad en lugar de dedicarse plenamente en lo que realmente era el puto amo). Llevaba siete años sin actuar en directo y él mismo llegó a creer que su momento había pasado. Pero el 3 de diciembre de 1968 Elvis reapareció en un concierto retransmitido por la NBC para todo Estados Unidos y demostró que aún estaba ahí. Su carrera volvía a relanzarse y ya no dejaría de dar conciertos hasta su muerte, en 1977. Ese especial televisivo del que se cumplen ya 42 años se tituló sencillamente Elvis, pero ha pasado a la historia con el nombre de 68 Comeback Special. La verdad es que es un lujazo poder disfrutar de él en calidad dvd y encima realmente tirado de precio (son 440 minutos de contenidos por sólo 8,95€). No puedo dejar de recomendárselo a todos los fans del Rey, e incluso a los que no son fans, porque realmente merece la pena escuchar a Elvis interpretando algunos de sus mejores temas en este tremendo especial. Os dejo un vídeo con el que se abre el dvd, donde vemos a un Elvis con 33 años mu bien llevaos recuperando su trono y demostrando que aún era el puto amo. ¡Larga vida al Rey!.