Estábamos el otro día aquí reunidos en la sede del blog hablando sobre «la Oreo» (una vecina nuestra a la que llamamos así porque todo el mundo la cogen, la abren, la chupan y la bañan en leche), cuando de pronto uno de nuestros redactores cambió de tema y nos comentó que si nos habíamos pispado de cierta novedad molona que acaba de sacar a la venta ECC ediciones. Tras decirle que no teníamos ni zorra idea este muchacho nos hablo de Lot 13, uno de esos cómics que da más miedo que estar jugando ahí de tranqui una pachanga al basket y de pronto ver venir hacia ti a un negraco de dos metros con intención de hacer un mate «in your face»…
«¡Te pego un meco que te reviento la cabeza, payaso!»
El caso es que me imagino que los nombres de Glenn Fabry y Steve Niles son conocidos por cualquier persona metida en el mundillo. Este último es famoso por su forma de prodigarse en los cómics de terror (entre los que destacan 30 Días de Noche o Criminal Macabre). Pues bien, esta vez el bueno de Niles vuelve a la carga con Lot 13, una historia que nos pone en el pellejo de la familia Waytt, quienes se mudan a su nueva casa, pero cuando llegan a su destino descubren que su nuevo hogar aún es inhabitable. Entonces deciden pasar la noche en un hotel. Craso error. El lugar elegido está plagado de muerte y monstruos. ¡Bienvenidos a un edificio que asustaría hasta al creador de El Resplandor!. Steve Niles ya es una leyenda viviente del género de terror y en esta ocasión se une al excepcional Glenn Fabry para ofrecernos una aventura de tinte clásico ¡pero completamente aterradora!.
Ole ahí la portadita guapa
La verdad es que me he documentado leyendo algunas reseñas sobre este cómic y no lo ponen nada mal. Además el aspecto terrorífico de ciertas viñetas con ese peculiar estilo de Glenn Fabry tienen una pintaza tremenda. Así que creo que voy a añadirlo en mi lista de la compra para hacerme con él en mi próxima visita a la tienda, pues este primer tomo recopila los cinco primeros números por 11,95€ de mierda…