La primera vez que escuché algo sobre Deadlight y, sobre todo, vi alguna captura, tengo que reconocer que el juego se grabó en mi memoria en la lista de los juegos que tenía que probar algún día. En mi juventud era un apasionado de los juegos de plataformas cinemáticos, como podían ser el famoso Prince Of Persia, Another World o Flashback. Por ello me alegró mucho que Tequila Works, un pequeño estudio español afincado en Madrid, se atreviese a realizar un juego de estas características. Y qué demonios, uno que tuviera temática zombie no me lo podía perder.
El equipo consiguió ir de la mano de Microsoft (no sé si esto es bueno o malo) para ser uno de los buques insignias del pasado Summe Of Arcade 2012 de XBOX LIVE, siendo exclusivo para esta plataforma durante algunos meses. Más tarde el juego saldría para PCs, bajo la plataforma Steam (que es la que yo he jugado).
La acción nos sitúa en el año 1986. Una extraña enfermedad, al parecer derivada de la rabia, ha causado estragos en la sociedad y convierte a las personas en muertos andantes que la humanidad denomina sombras. Tomaremos el papel de Randall, un padre de familia que se encuentra en medio del apocalipsis, acompañado de un grupo de supervivientes que se las apañan como pueden para dirigirse a una zona asegurada por los militares. Al comienzo de la aventura Randall se separará accidentalmente de su grupo y comienza una huida apresurada hacia la zona segura. Por el camino conocerá algunos personajes que le ayudarán en su tarea.
Seremos partícipes de cómo la sociedad se ha ido al garete.
Como ya he comentado, Deadlight es un juego de plafaformas 2D de scroll horizontal, donde deberemos sortear los distintos obstáculos usando las habilidades de Randall. A parte de ir saltando para avanzar, tendremos que resolver pequeños puzles que complicarán la tarea del protagonista. Eso sí, la dificultad de estos puzles es muy básica y no tendremos ningún problema en avanzar. Otro de los aspectos que caracterizan a juegos con esta mecánica es que ponen a prueba la habilidad del jugador para medir los saltos, pero aquí son tan suaves que tampoco nos resultarán complicados.
Queda claro nada más empezar la partida que deberemos evitar a toda costa los enfrentamientos con las sombras, dado que no dispondremos de muchas armas con las que defendernos (aunque las habrá). Para ponernos aún las cosas más complicadas, se ha incluido un sistema de fatiga que evitará que podamos hacer muchos esfuerzos continuos, por lo que tendremos que tener mucho cuidado a la hora de mantenernos colgados de algún saliente o de hacer actividades que puedan cansar a Randall.
Randall es acosado por los zombies como si fuera una borrachuza en una discoteca.
Uno de los aspectos que más llaman la atención de Deadlight es, sin duda, el especial cariño que se ha puesto en todo su aspecto artístico, con unos escenarios muy conseguidos y muy cuidados. De hecho, este es uno de los aspectos que me decidieron por su compra, a pesar de las malas notas que le habían dado los medios especializados. Toda la aventura se desarrolla en el plano horizontal, pero se ha dotado a los escenarios de profundidad, donde incluso a veces se desarrollan algunos sucesos.
Lo que no queda muy claro durante nuestra aventura es la historia del juego. El núcleo de la aventura está clara, que no es más que avanzar como podamos esquivando los peligros, pero iremos encontrando hojas sueltas del diario de Randall que esclarecen un poco más su historia. Este es un punto donde este título flojea un poco, dado que esas hojas dejan presente que Randall está un poco ido de la olla, pero realmente no tienen ningún tipo de efecto en la historia del juego (a no ser que, como comentaré más adelante, veamos el final alternativo). Si sumamos a todo esto que el juego dura poco más de cinco horas (incluso podría terminarse en menos), nos deja un regusto amargo en la boca cuando lo finalizamos. Sobre todo porque el final aparece abruptamente cuando las cosas parecen estar poniéndose mejor, dejándonos con la siguiente frase en la cabeza: ¿Pero qué cojones?.
Randall observando la decadencia de su ciudad después de la fiesta de nochevieja.
Informándome un poco sobre el trabajo de Tequila Works en este proyecto, queda patente que el título ha sufrido recortes y modificaciones de última hora que se seguro han alterado un poco la experiencia. En una excelente entrevista que The Vault les hizo a principios de año (que recomiendo leer para que entendáis el por qué el juego se queda a medias), los creadores afirman que la relación con Microsoft no fue la mejor que se pudo esperar y se les impusieron muchos cambios de última hora para acercar el título a un mayor grupo de jugadores. Esto hizo que la idea original de Tequila Works se viese desvirtuada y que como resultado quedase un juego cojo cuya historia era difícil de comprender. Tuvieron que modificar la forma de jugar, hacerla mucho más sencilla y accesible y sobre todo, recortar grandes partes de los diseños de niveles. De hecho, en la versión de PC se incluye un final alternativo (el que Tequila Works tenía pensando usar) que sólo podremos ver si terminamos el juego en dificultad Pesadilla.
En definitiva, un juego del que tenía grandes expectativas y que me ha decepcionado un poco. Esperemos que el joven equipo madrileño aprenda de la experiencia y nos traiga mejores juegos.
Joe, pos me quitas la ilusión.
Por cierto, el Flashback era lo más grande.