Análisis: La Tierra Media – Sombras de Mordor

Las pasadas ofertas de Navidad han sido bastante prolíficas a la hora de incrementar mi flamante lista de juegos de Steam. Esta vez he intentado contenerme bastante, comprando sólo aquellos juegos que quería disfrutar a corto plazo, pero como siempre, alguno se me terminará quedando en el tintero (sobre todo echando un vistazo todo lo que se supone que vendrá durante este próximo año). Entre los comprados, había uno que me llamaba bastante la atención después de haber leído cosas buenas de él en los medios: La Tierra Media – Sombras de Mordor.

Siendo sincero, cuando vi por primera vez imágenes del juego no me llamó demasiado la atención. Parecía un clon de los Assassin’s Creed con algunos toques de los Batman a la hora de combatir. Ese nicho de mercado me parece ya bastante congestionado como para perder mi tiempo en más clones innecesarios (y más con la de ACs que tengo en mi lista por jugar), pero qué coño, me lié la manta a la cabeza y me dispuse a masacrar hordas de orcos. No podía ser aburrido.

El argumento nos sitúa entre los hechos acontecidos en El Hobbit y el Señor de los Anillos. El ejército de Sauron está tomando posiciones en las tierras de Mordor y comienza su avance en la lucha por conquistar el resto de la Tierra Media atacando La Puerta Negra, un enorme muro de contención hacia las tierras de Mordor. Durante esa batalla, nuestro protagonista Talion, un montaraz de Gondor, y su familia son asesinados. Pero el descanso del montaraz le será negado debido a una maldición que le unirá al espíritu de Celebrimbor y que únicamente desaparecerá cuando ambos, compartiendo el mismo cuerpo, destruyan a La Mano Negra, uno de los capitanes de las fuerzas de Mordor.

Talion en todo su esplendor

Es aquí cuando se nos invita a disfrutar del desolado paisaje de las tierras de Mordor, acompañando a ambos protagonistas en su venganza. Como buen montaraz, usaremos las habilidades de Talion en conjunción con los poderes otorgados por su unión con Celebrimbor para abrirnos paso entre las huestes del ejército de Sauron, dando caza a los capitanes del ejército para llamar la atención de La Mano Negra.

El juego se plantea como un sandbox donde tendremos que realizar misiones para avanzar en la historia principal y algunas misiones secundarias de recolección para aumentar el poder de nuestro protagonista. Pero pronto nos daremos cuenta que la principal diversión del juego no es la historia en sí, si no las diabluras que podremos hacer al ejército orco y sobre todo el espectacular sistema de combate, heredado de los Batman Arkham, magistralmente implementado. Es una auténtica gozada plantarse entre más de veinte orcos y darles para el pelo ejecutando combos mientras se integran vistosas animaciones de ejecuciones. Tal es la vistosidad de los combates que nos sorprenderemos en muchas ocasiones luchando contra orcos sin estar enfrascados en ninguna misión principal.

El modo Foto nos permitirá capturar momentos interesantes

Pero como en todo ejército, no es lo mismo luchar contra orcos rasos que contra sus capitanes. Aquí es donde el juego nos hará plantear estrategias de cómo abordar el ataque a los distintos capitanes del juego hasta llegar a los mismísimos caudillos y hacerles caer de su pedestal. Cada orco de alto rango tendrá una serie de debilidades y fuerzas que le harán diferente a otros y una de nuestras misiones será la de descubrirlas interrogando a determinados oficiales orcos. La primera vez que nos enfrentemos a un capitán notaremos que no es un orco normal. El juego nos los presenta de una forma bastante espectacular (sobre todo los caudillos) que harán que nos sintamos dentro del juego de una forma muy lograda.

Otro aspecto a resaltar en Sombras de Mordor es su grandísima banda sonora y su perfecto doblaje al castellano. No sé cómo será en versión original, pero para mí el doblaje a la lengua de Cervantes es sobresaliente.

El ejército de Sauron nos espera

En definitiva, Monolith Productions ha sabido cómo mezclar los aspectos más notables de otras franquicias y consigue crear un cóctel que nos hará pasar muchas horas de diversión, aún cuando la historia no sobresale. Hacía mucho que un juego no me creaba esa sensación de querer completarlo al cien por cien ni que hiciera que las horas se me pasaran tan rápido. Yo si fuera vosotros no perdería la oportunidad de poder jugar a uno de los juegos que parece que ingresarán en esa funesta lista de tapados. Diversión a tope.

NOTA: Si queréis disfrutar del mapa de La Tierra Media y de su recorrido de los héroes de la película os recomiendo que echéis un vistazo aquí.