Análisis XCOM: Enemy Unknown

Aún recuerdo lo que UFO: Enemy Unknown (en Norte américa se llamaba XCOM: UFO Defense) significó para mí cuando era un chaval: me tenía enamorado. Un juego de sistema de turnos donde encabezábamos un grupo de élite en su lucha contra una invasión alienígena que me tuvo horas y horas enganchado a la pantalla del ordenador. Por ello, el remake anunciado por 2K Games y desarrollado por Firaxis Games en 2012 me causó una grandísima alegría y, por qué no decirlo, un terrible miedo a que se cargasen tan gratos recuerdos que tenía del juego original desarrollado por Micropose. Después de pasármelo puedo decir que este nuevo remake está a la altura, aunque con algunas diferencias que le hacen algo inferior (o eso, o mi memoria me la está jugando). De hecho, durante todo el análisis intentaré comparar ambos juegos para ver qué se ha perdido y qué se ha ganado.

El argumento de XCOM: Enemy Unknown no cambia un ápice de lo que se contaba en el original de 1994. La acción, situada en un futuro cercano, nos pone al mando de un grupo paramilitar internacional, llamado XCOM, cuyo principal objetivo es detener la inminente invasión alienígena. El mundo entero se unirá contra la amenaza, proporcionando recursos al grupo XCOM en su lucha. Pero no todo es tan bonito, algunos de ellos se retirarán del proyecto si no les damos cobertura suficiente y perderemos su importante financiación.

La cámara nos ofrecerá ángulos de la accción bastante resultones

El sistema de juego entremezcla un sistema de gestión en el que nos haremos cargo de la base central de XCOM y un sistema por turnos cuando llevemos a nuestras tropas a la acción. En este último, podremos manejar a un grupo de hasta seis miembros (en el original podíamos llevar hasta 14, ahí es nah) con el que derrotar a las tropas enemigas. Se producirán diferentes tipos de misiones: atacar naves alienígenas aterrizadas o derribadas, ayudar a la población civil en ataques de terror, misiones en las que tenemos que desactivar una bomba, etc. En todas ellas es importante balancear nuestras tropas respecto a su rol. Algunos soldados estarán centrados en el ataque cercano mediante el uso de escopetas, otros en armas pesadas, rifles y francotiradores. Uno de los aspectos que se ha mejorado respecto al original es el sistema de mejora de nuestras tropas. Las unidades ganarán experiencia con cada misión y con ello ganarán nuevas habilidades elegidas por nosotros (si no recuerdo mal, en el UFO de 1994 estas mejoras se basaban en atributos como la puntería, fuerza, etc y subían según las usásemos en las misiones).

En cambio, una cosa que no me ha gustado es la eliminación del inventario de las tropas (o al menos soy tan pardillo que no he visto cómo hacerlo). Cuando uno de los miembros del pelotón caía en batalla, otro podía ir y recuperar su inventario para poder usarlo en el transcurso de la misión. Hay algunos artículos que pueden ser cruciales en una misión, como los botiquines. Además, en el juego original podíamos armar a los militares con varias granadas (ahora sólo podemos cargarles con una o dos, dependiendo de sus cualidades)  y los más interesante, con cargadores para las armas. Esto le daba más realismo al juego, dado que podíamos encontrarnos en algún momento de la misión sin munición y realmente jodidos.

A veces la liaremos parda. ¡Entornos destruibles!

Aparte de las misiones de campo, tendremos que hacernos cargo de la base central de XCOM planificando la construcción de nuevas salas con las que conseguir nuevas opciones a la hora de enfrentarnos a los alienígenas. En el juego original podíamos tener varias bases desperdigadas por el planeta, mientras que en este nuevo remake sólo tendremos acceso a una. Incluso, los aliens podían atacar nuestras bases con el consiguiente acojone (esta opción, al parecer, se ha añadido a la expansión XCOM: Enemy Within). Desde nuestra base seremos capaces de detectar amenazas alienígenas y gestionar todos nuestros recursos, desplegar nuestra defensa aérea construyendo y mejorando nuestros cazas que usaremos para derribar ovnis. Un aspecto determinante en el transcurro del juego será investigar los artefactos alienígenas recuperados en nuestras misiones para habilitar un abanico de tecnologías que nos permitirán fabricar nuevas armas y artefactos que nos harán la vida un poco más sencilla.

Los chicos de Firaxis han sabido mantener varias de las características que, a mi entender, hicieron grande a UFO. Entre ellas, podemos destacar el continuo desasosiego del jugador al saber que cualquiera de sus tropas puede morir en cualquier momento. O la sensación de que por más que investiguemos ellos nos superan en tecnología y siempre estemos un paso atrás. Pero para mí, la mejor es la de ir conociendo a los aliens poco a poco. Según vayamos avanzando en nuestra misión conoceremos nuevas tropas alienígenas de las que desconocemos sus habilidades y su potencia mortífera, lo que incrementa nuestra sensación de sorpresa y miedo al pensar cómo coño nos la va a liar esa nueva tropa.

El Coronel Ondede «EL PUTO AMO» y sus colegas

En definitiva, el juego no me ha defraudado. Mantiene muchas de las características que me encantaban del juego original y me ha tenido pegado unas cuantas horas frente al monitor. Quizás se han descafeinado algunas características notables, pero que no desmerecen el resultado final del juego. Un magnífico título que se llevó varios premios a mejor juego del año. Yo no me lo pensaría dos veces en jugarlo, sobre todo porque tendremos secuela en Febrero de 2016. ¡Deseando estoy de jugarlo!