Poco a poco esta sección mierdera se está convirtiendo en todo un clasicote semanal en donde se dan cita toda esa amalgama de hostias o momentos gilipollescos que plasman la gran mayor parte de los gifs animados del planeta. Y como todas estas gilipolladas sabemos que os molan, aquí os dejamos la octava entrega del bastardadas varias, para que disfrutéis con toda esta sarta de sandeces. Así que nuevamente hemos indagado por la red a la caza y captura de esos momentazos míticos y por ello hoy os traemos esta nueva retahíla de paranoias varias. Vamos ya con ello…
Y empezamos con uno de esos momentos de amigos cabrones con los que uno nunca deja de sorprenderse hasta qué cotas insospechadas pueden llegar para putearte cosa mala.
A continuación os dejamos con otra hostia, esta vez de un niño a su hermana, que ya no solo es que no la deje hacer cucamonas a la pobrecilla, sino que encima le patea la cara a lo nazi.
Este otro gif refleja uno de esos momentos en los que uno se ciega a lo bestia y le puede el ansia de pegar un balonazo a alguien y al final (por azares del destino) es uno mismo quien se lleva el hostión.
Aquí tenemos uno de esos momentos en los que un padre se pone malo cuando uno de sus hijos se pone ropas chungas que no le molan ni un cacho. A más de un progenitor le molaría exteriorizar lo que siente en ese momento tal y como hace aquí papá-gato.
Vamos ahora con otro gif animado en el que podemos ver a un criajo que bien podría haber sido extra en la peli de El Exorcista en la escena aquella en la que la niña pota.
¿Quién de vosotros no tiene al típico amigo patoso que en un momento lía la de dios?. Pues esta estampa refleja a uno de esos patazas en plena acción.
Y para finalizar vamos con un clásico que ya todos habréis visto en alguna ocasión pero que yo no me canso de ver. Ni penalty de Sergio Ramos ni pollas, el mejor penalty del mundo es este.