Crank vs Crank 2

He comenzado el año intentando prestar atención a esos pequeños detalles y he descubierto que en este mundo hay cosas que me sorprenden. Ver al Dúo Dinámico en la noche de fin de año cantando “15 años tiene mi amor” te hace pensar que unos tipos que pasan de los 70 fijándose en niñas de 15 es algo que roza la perversión y eso es pederastia en mi pueblo.

Como el tema festival no me interesaba, me puse una película. Después de tragarme el anuncio de piratería, que no me puedo saltar por más que machaco el botón FAST, comenzó el espectáculo. No dejé de pensar en lo absurdo que es meter un anuncio de piratería en una película original. ¡¡Pedazo de bastardos, me dejo la pasta y me hacéis tragar el anuncio de los huevos. Qué yo la he pagado!!!. Anda y que le taladren al pirata pero yo no tengo porqué sufrir semejante martirio.

Bueno, el caso es que tenía las películas “Crank: Veneno en la sangre”  y “Crank: Alto voltaje” de Jason Statham para ver desde hacía unos años perdidas en la estantería. Después de verme las aventuras de Chev Chelios repartiendo castañas, amputando extremidades mientras se rodeaba de mujeres en top less, que corrían muchas de ellas con algo de sangre en su piel desnuda, me di cuenta de que a los directores Mark Neveldine y Taylor se les fue la pinza en algún momento (un detalle, Neveldine es el director de Ghost Rider: Espíritu de venganza, película que llegará en el 2012 a nuestros cines).

Como Leonardo DiCaprio en Titanic: ¡¡¡Soy el rey del mundo!!!!

 “Crank: Veneno en la sangre”  fue en su día algo absurdo, pero una exageración controlada de una película de acción. Por otro lado “Crank: Alto voltaje” es multiplicar por 100 la película anterior, más tortas, más disparos, más sangre, más mujeres enseñando chicha, más situaciones absurdas que hacen perder el norte al espectador.

¡Voy "to quemao"!

En algún momento de “Crank:  Alto voltaje” llegas a pensar que los directores se están burlando de ellos mismos y de su anterior película, que ya era una burla exagerada del género de acción y velocidad sin frenos. El problema es que la segunda aparte no  sorprende porque la primera ya gastó ese cartucho.

Intentando dejar las cosas claras.

Si quieres ver algo bien burro y pegarte unas risas con los amigos, adelante. Las dos películas son absurdas, pero son unas buenas películas. Como sorpresa en la segunda parte tenemos a un abuelo David Carradine, entre otras apariciones de minuto y medio. Como escena para olvidar, la recreación a lo Power Rangers de una lucha de dos monstruos en la central eléctrica.