Han pasado ya algo más de dos añazos desde cierto día en el que estuve en casa del otro colaborador de este blog (el nunca bien ponderado Kiko) y me puso la demo del Dead Rising para Xbox. Fue ese mismo día cuando levanté una mano en alto mirando al cielo a lo Escarlata O’Hara y puse a dios por testigo de que tenía que hacerme con esa consola y ese juego. Así que cuando salió a la venta hace unos meses la 2ª parte de este clasicazo no pude menos que hacerme con él en cuanto se puso a un precio asequible en las páginas de venta de juegos de U.K.
Previamente me había descargado del Bazar de Xbox Live el DLC titulado Case Zero, que servía como prólogo del juego para ir abriendo boca. En él se nos presentaba al nuevo chulazo de moda (Chuck Green), quien acompañado de su hija Katey iban huyendo de toda esa abrumadora oleada de zombies que se iba extendiendo cada vez más y más.
Así que una vez catado ese contenido descargable me metí de lleno en el juego que nos ocupa, del que hay que reconocer que es un Dead Rising bastante parecido a la 1ª entrega pero con unas mejoras sustanciales que favorecen la jugabilidad. Como digo, el parecido con la primera parte radica principalmente en los lugares por los que nos movemos , pues si anteriormente el juego partía del escenario principal consistente en una especie de refugio que conectaba con un centro comercial, aquí veremos que se trata de un casino-hotel, pero que a la larga gran parte de esos escenarios recuerdan al centro comercial de la 1ª parte.
En lo que se refiere al estilo de juego de Dead Rising 2, hay que decir que guarda también bastante parangón con respecto a su predecesor en el sentido de tener un plazo límite de 72 horas para ir haciendo las distintas misiones (tanto la principal como las secundarias) con el fin de ir avanzando en la trama hasta llegar al desenlace. Es precisamente en estas misiones donde radica la mayor «pega» que se le puede poner a este juego, pues a la larga casi todas ellas son muy parecidas y consistentes en poner a salvo en el refugio a los distintos supervivientes repartidos por los diferentes puntos del mapeado. Sin embargo, hay que decir en su favor que en esta 2ª entrega se ha incluido la peculiaridad de poder pasarse el juego en modo cooperativo online con un colega, con lo cual a pesar de lo repetitivo de muchas misiones el juego gana vidilla si se realizan en compañía de un amigote. Mi colega Kiko y yo estamos enfrascados en el modo campaña y hay que reconocer que el juego gana bastantes enteros jugado de esa forma, ya que es un pique ir avanzando los dos despachando a los cientos y cientos de zombies que hay por todas partes.
A este respecto hay que comentar otro de los puntos fuertes del juego como es la posibilidad de poder interactuar con casi cualquier cosa que encotremos por el escenario, ya que todo es susceptible de ser usado como un arma para abrirnos paso entre los zombies. Eso por no hablar de la posibilidad de combinar objetos que acrecientan la características ofensivas de estos. A todo ello hay que sumar otra modalidad de juego en multijugador, la cual pude probar el otro día y es bastante divertida, pues viene a ser algo así como una especie de concurso televisivo en el que el objetivo es ir realizando diferentes pruebas para ver quién revienta más zombies. Sin duda alguna, con ella se contribuye también a aumentar la vidilla del juego.
En definitiva, Dead Rising 2 es un juego que recomiendo encarecidamente si te gustó la 1ª parte, pues mantiene todas las cosas molonas de esa entrega anterior pero todo ello bastante mejorado tanto a nivel de gráficos, sonido y jugabilidad. Insisto en mi recomendación de jugarlo en modo cooperativo con un colega, porque es verdaderamente divertidísimo ir reventando zombies entre dos y es como más se disfruta el juego. Comentaré por último que desde hace poco está disponible otro contenido descargable titulado Case West, en el que Chuck Green comparte protagonismo con Frank West (el prota de la 1ª parte), y que se puede disfrutar también en modo cooperativo. Lo tengo ahí ya descargadito para jugarlo con Kiko en cuanto nos pasemos entero el juego.