Hoy por hoy la única parrilla que tolero es el modelo ese tan chulo que venden en el Carrefour para asar filetones, pues en lo que se refiere a la parrilla televisiva actual me resulta una puta mierda como un piano de grande (toda llena de realitys y programas gilipollescos). Es tal el ascazo que tengo por la tele que creo que la única cadena que merece la pena es Clan TV, pues es vox populi que con Bob Esponja me parto el ojete y me resulta lo mejor de la televisión con diferencia. Pero el otro día me lancé por bulerías y me dio por poner el canal Boing ese (pues por el nombre me hice ilusiones de que a lo mejor saldrían tetas botando). Pues mire usted por dónde me topé con unos dibujos cojonudos…
Y me estoy refiriendo concretamente a la serie de El asombroso mundo de Gumball, unos dibujos animados que si no has tenido el placer de ver nunca ya estás tardando. Realmente lo que me resulta más divertido de ellos es esa curiosa mezcla que hace de elementos de animación por ordenador, stop motion, animación tradicional y elementos reales. El personaje principal (Gumball) es una especie de gato azul de 12 años, que junto su mejor amigo Darwin (un pez anaranjado de 10 años) pasarán aventuras increíbles tanto en el cole como fuera de él.
La verdad es que así leído el argumento muchos podréis pensar que si me he vuelto gilipollas o bajo el influjo de qué fármaco alucinógeno estoy como para ver una puta mierda de este jaez. Pues bien, para los que hayan pensado eso les diré que la serie es cojonuda y que personalmente me parto el ojete con ella, hasta el punto de que Darwin se ha convertido en uno de mis personajes preferidos actuales. Así que querido lector, si nunca has tenido el placer de catarla, echa un vistazo a la programación diaria del canal Boing, y elige alguna franja horaria en la que tengas tiempo para ver algún episodio de los varios que echan al día y poder comprobar si te convence tanto como a mí. Lo dicho, lo mejor de la tele, con diferencia…
Eh coincido completamente contigo. Ya se sabe que la televisión lleva muchos años no siendo lo que era antes de Gran Hermano, pero todavía se encuentran pequeñas recompensas como esta.
¿Hora de aventuras? ¿a quien co…ndimentos le importa? sigo viendolo aburrido y las voces en castellano dan escalofríos al intentar hacerla «baddass» no, lo siento, me quedo con Gumball.
Que por cierto las voces originales no tienen pérdida tampoco.
Que curioso,a mi me ha pasado exactamente lo mismo.Hace unos dias haciendo zapping lo vi,y me parece una serie buena en todos los sentidos.Por cierto,si no lo he entendido mal,Darwin es su hermano.Padre conejo,madre gato,hermana conejo,hermano pez dorado,y el un gato.
Sí, Darwin es un pez que antes era la mascota de Gumball, pero un día le crecieron piernas, brazos y aprendió a hablar. Gumball y él se hicieron amigos rápidamente y fue considerado un miembro más de la familia. Así que se puede decir que no es realmente su hermano, sino un hijo adoptado por los Watterson.
Llevo un par de años viéndola. de verdad de lo mejorcito de la tele. Acabo de cumplir 44 y me lo paso de cojones viéndola con mi criaja de 3.El personaje ese que es una cara al revés(barbilla y boca) es la recontraostia de imaginativo. Me parto el ojete con papá conejazo. El episodio de la varita mágica es magistral. Un flipe de serie.
Siii, el episodio de la varita es cojonudo.
A mí el que más me ha gustado es aquel en el que el padre consigue trabajo de pizzero y está a punto de desencadenar el fin del mundo.
Jajaja, yo también lo veo a veces cuando me da por ver qué ponen en el Boing (reconozco que en su día me piqué también con Hora de Aventuras). Me parece una serie super divertida. El mejor, el Padre Conejo. Un Homer en toda regla.
El mejor es Darwin 🙂