Hemos de reconocer que los muchachos del Vas Tú Listo conocemos a un sinfín de gentecilla rara con talentos la mar de gilipollescos. Por ejemplo, sabemos de un menda que tira los gapos hacia arriba y le vuelven a caer en la boca; hay otro que cuando se come un filete lo hace bola y se puede tirar con él dentro de la boca durante horas como si fuera un puto pelícano. Pero estos talentos se quedan en bragas ante el que hace gala el protagonista del cómic que reseñamos hoy: Luther Strode.
Y es que he de decir que se trata de una historia a la que yo personalmente tenía más ganitas de catar que un gordaco a un paquete de Quesitos, debido a las más que buenas críticas que lo avalaban y de las que me documenté antes de su compra. Y ciertamente se trata de una historia curiosa de cojones de la que he de reconocer que me ha sorprendido muy gratamente, sobre todo por el estilo de Tradd Moore, un dibujante al que no tenía el placer de conocer pero que me ha encandilado ese trazo suyo tan evocador al del gran John Romita Jr.
El extraño talento de Luther Strode es ante todo una historia que gira en torno a un argumento muy claro: el uso que se hace del poder. Concretamente lo que puede hacer con él una persona débil y tirillas que desde jovencito sólo se ha llevado hostias por parte de su padre, y que en el instituto le vacilan día sí y día también. Pero, ¿qué pasaría si de buenas a primeras esa personita se convirtiera en un cachas capaz de doblegar a cualquiera gracias a un curso de culturismo que ha encontrado en un anuncio de un tebeo antiguo? (un más que curioso y extraño curso, todo hay que decirlo).
Es algo así como el pobretón al que un buen día le toca la lotería y de buenas a primeras se ve forrado hasta el punto de que el dinero y las riquezas le salen por el ojete. ¿Qué haría esa persona?. ¿Las malgastaría hasta quedarse como estaba o sería prudente y se controlaría a la hora de hacer un despilfarro?. Pues una tesitura parecida de cambio radical es la que plantea el argumento de este cómic, cuando el bueno de Luther deja de ser un pobre diablo y se convierte en un cachas capaz de arrancarte la cabeza de una hostia gracias a ese curso de culturismo.
Todo ello da pie a esta historia de superhéroes con toques muy gore y que por momentos me traía a la cabeza a personajes como Kick Ass o al bueno de Spiderman (en el sentido de un pobre muchacho que un buen día decide enfundarse un traje y salir a la calle para proteger a los inocentes, pero que de buenas a primeras se dará cuenta de que las cosas no resultan tan sencillas y acabará inmerso en una espiral de violencia en la que sufrirán hasta sus seres queridos).
Eso sí, merece la pena comentar que se trata de un cómic no apto para gente tikis-mikis, porque las escenas de violencia explícita y sin ningún tipo de recato ni pudor están a la orden del día. Y es que tanto guionista como dibujante no se cortarán un cacho a la hora de plasmar las tremendas barrabasadas y escabechinas que pueden ocasionar en la gente normal estos tiarrones de fuerza ilimitada.
En definitiva, El extraño talento de Luther Strode es un entretenido cómic que nos deja la curiosa moraleja de que a veces a uno le gustaría usar ciertos dones para ayudar a los demás y finalmente las cosas se pueden torcer tanto y desarrollarse de tal forma que puedes acabar usándolos para algo muy distinto y encima dejando víctimas a tu paso (y lo que es peor, involucrando en ello a tus seres queridos). No os esperéis una parodia tipo Kick Ass, porque se trata de una historia más bestia y mucho más sangrienta, pero eso sí, curiosa como ella sola…