En busca del MMO perdido

Para los que no me conozcáis aún (o sea todos, ya que es mi primer artículo) os diré que lo que yo busco no lo encuentro desde el Star Wars Galaxies. ¿Y que pasaba con el Star Wars: Galaxies?. Pasaba que era un MMO de verdad, al menos en mi opinión. Nosotros nos hacíamos un personaje por primera vez y nos metíamos con la gran esperanza de ser el próximo Luke Skywalker y el juego era tan bueno que conseguía que te olvidases del muy llorón para tratar de ser tú mismo.

Tú mismo podías ir pululando por los planetillas, haciendo el cabra loca con tus colegas e inventándote tus propias historias. Los planetas eran grandes y tenían cuevas, no sabías, de verdad, lo que te ibas a encontrar en ellos. Lo mismo ibas tan tranquilo por el campo cogiendo ADN de diplodocus de Dantooine cuando veías a un rebelde haciendo prospecciones para ganarse la vida (y te dirigías a matarlo por supuesto, que el Imperio tiene una política muy estricta de zero tolerance con nada que sea rebelde o cosa de alzarse. Y que bien nos los pasábamos. Pero pasemos a ver punto por punto lo que pasaba…

Mos Kashyyyk – Sí, se llama como el planeta del felpudo

– El loot (objetos que sueltan los enemigos): El loot era un truñardo de cuidadito, con deciros que el mejor objeto que yo vi en ese juego y que soltase un bicho era una porra que aturdía al personal un poquito a veces…

– Ser Jedi: El sueño húmedo de cualquier paladín de la Alianza!!!!. Pues era jodido de narices, nada de niños volviéndose invulnerables para tirar de piedra y a la taberna. Así que nada de niños por aquí, es más, jugadores bastante competentes no se dedicaban a ser Jedis porque no estaban dispuestos a pasar por todos los sacrificios que eso conllevaba. Porque los Jedis eran unos pavos que te daban la del tigre en un uno contra uno. Oh, que injusticia…¡NO!, no lo era porque las pasabas más putas que Marco buscando a la madre, y el esfuerzo se recompensaba.

– Los escenarios: Bastante chulos en cuanto a paisaje nos referimos pero ojo, las ciudades eran muy feas y monótonas…

– Las quests (misiones): ¿Las que????!?!?!?. ¿Que me comes qué???!. Vete y mata 20 bichos por 6000 créditos. Vale, hecho. Otra quest, vete y mata 50 de estos otros bichos por 10000 créditos (…..en serio?). Sí, en serio. También había quests de crafting por si uno quería variar. Hola, necesito que fabriques 10 radios, te doy 1000 créditos. Hola necesito que fabriques 100 radios, te doy 10000 créditos…..¿pero esto qué es?. ¿Economía sumergida?.

El juego te daba todos los elementos necesarios para que fueras lo más hortera posible

Visto este desaguisado….¿pero qué demonios hacía yo jugando a esta aberración?. Pues muy fácil, el juego parecía vacío, monótono y repetitivo pero porque no intentaba crear un mundo para llevarte la de la mano, sino que  te daba todas las herramientas necesarias para que hicieras de ese mundo tu casa virtual:

– El crafting: Base de toda la economía del juego. Los mejores objetos solo podían ser conseguidos por jugadores que se dedicaran a la fabricación, y dentro de esto, los mejores jugadores hacían los mejores objetos porque eran mas concienzudos y buscaban los mejores materiales. Porque tú podías ser un artesano mediocre, con precios mediocres, claro.

– El farming de materiales: Brillante. Aquí no vamos por por cursilandia matando conejos y de repente vemos un nodo de cobre, plis plas y ya tengo cobre, no. Aquí agarrabas y te ibas a buscar lo mejor de lo mejor, porque tú eras un tío grande y tus clientes lo valían todo. Mirabas el cobre del planeta donde estabas, tenía unos atributos y al mismo tiempo mandabas sondas a cada uno de los demás planetas para ver qué tipo de cobre tenían. Una vez que comprobabas qué planeta teníia el mejor cobre te ibas allí y hacías prospecciones del suelo para ver dónde estaba la mayor concentración de cobre de ese tipo. ESTO es currarse las cosas señores.

– El housing: En el Star Wars: Galaxies, tú te comprabas una casa (que por cierto había fabricado un arquitecto) y pagando una manutención la mantenías en aquel lugar del planeta que quisieras a la vista de todos. Y esa era tu casa, y tenías vecinos y te conocían. Es más, con una pequeña inversión adicional ponías un dependiente robot que vendía los productos que habías fabricado, los cuales tenías como muestra por toda la casa. Y ya no hablemos de las ciudades que hacías con tu clan, que ponías en un mapa a la vista de todos.

Así son las fiestacas en la sede del Vas Tú Listo

En resumidas cuentas, tus aventuras las creabas tú con tus amigos, que podías conocer de antes o haber conocido en el juego (y así ocurrió en mi caso). Nunca sabías qué iba a pasar…¿Sería una tarde tranquila fabricando cosas?, ¿un poco de prospección?. ¿Quizás atacar esa ciudad Rebelde (yo era Imperial y a mucha honra) que se había situado cerca y era de un clan rival?.

Eso era una experiencia de juego SANDBOX, nuestras acciones tenían un impacto en el mundo y eso es lo que espero encontrar en alguna medida, pero señores,  los programadores se han debido de borrar la memoria de entonces porque llevan 10 años en blanco, porque no dan con la fórmula correcta…aunque se van aproximando y, francamente, yo voy a estar allí para verlo y con suerte vosotros estaréis aquí para leerlo. Y mientras tanto pienso ir jugando a todo lo que se me ponga por delante, porque el frikismo hay que cuidarlo porque si no cuando menos te lo esperas te vuelves normal y ya te dejan de gustar estas cosas.

De eso y de muchas otras cosas relacionadas con los MMO hablaré en esta sección así como de MMOs del tipo Theme Park (Tipo WoW, en los que el mundo es estático y no puede ser cambiado por los jugadores), FPS (Disparar en primera persona) o lo que venga en gana.