La verdad es que si uno lee así en frío y de sopetón el título de este post se pensará que hoy vamos a hablar de jovenzuelos fumetas que se ponen ciegos a porros. El caso es que no sé si a alguno de vosotros os sonará el nombre de una editorial llamada Zenescope, o si sois de esos a los que si les sacan de Marvel o DC se quedan en bragas. Pues sí hijos míos, Zenescope es el nombre de la editorial que publica este cómic titulado Fly, el cual esperamos ver pronto por estos lares.
Comentando un poco el meollo del mismo, hay que decir que el argumento nos pone en la tesitura de la existencia de una droga denominada FLY, la cual proporciona al consumidor la habilidad de poder volar. Nuestro protagonista es un muchachuelo llamado Eddie Patron, quien se verá introducido en el consumo de esa mierda por su colega Francis Keiser (si es que ya se sabe que hay muchas amistades que son una mala influencia). Sin embargo, todo ello acabará trayendo movidas muy chungas tanto para él como para quienes le rodean.
Sin duda alguna, la colección tiene pinta de que nos dejará la moraleja de que cualquier droga, por atractiva que parezca, suele traer consecuencias graves para todo aquel que busca nuevas experiencias y alejarse del estrés de la vida diaria con cualquier tipo de «mierda evasiva». En definitiva, una historia de tipos con superpoderes pero que no son héroes en absoluto. Habrá que echarla un vistazo cuando llegue a publicarse por estos mundos de dios.