Si hay una persona que quiere más a los minimos que la loca de los gatos aquella que salía en los Simpsons, ese es el nunca bien ponderado Kiko. Si algún día vais a su casa y sois alérgicos a los gatos, fijo que os tienen que sacar de allí recogiéndoos con pinzas y os tienen que tirar directamente a la basura. Y es que son tres las mascotas gatunas que tiene este muchacho, suponemos que en homenaje a Selina Kyle y su afición por este tipo de animales. Y ciertamente los gatos son salaetes y tal, pero a veces se ponen muy pesados (y si no que le pregunten a Kiko por su gato Logan). Es ya mítica la frase que suele decir cuando está ahí todo concentrado jugando a la Xbox, ese minino empieza a agobiarle, y de pronto este muchacho grita aquello de «Logan, me tienes hasta la polla». Y es que gatos «pesaos» hay muchos en esta vida, pero también los hay que aparecen en el momento más inoportuno y joden una buena foto. A estos felinos les quiero dedicar mi post de hoy, porque haberlos haylos.
Y como primera muestra os traemos esta curiosa estampa que es buen ejemplo de ello. Ciertamente se puede decir que la dueña del minino en cuestión parece que es dada al cibersexo y a la costura (lo de la costura lo digo por los «dedales»). Pues bien, imaginaos que la piba está retransmitiendo en directo y en abierto (nunca mejor dicho), tiene ahí ya a todo el mundo casi listo para petar, y de pronto va el puto gato este, se pone en medio de la cámara y jode todo el clímax. Ciertamente en Vas Tú Listo pensamos que si hubiera un Dios bueno y justo no permitiría que pasaran estas cosas.
Aquí tenemos otro claro ejemplo de gato chupa-cámaras que es bastante dado al escorzo, la cucamona y la pirueta con tal de salir en una foto. El tío aparece ahí de la nada con una gracejo natural que da miedo, y seguramente pensando en que da caché a la foto. A la que sí que dabamos nosotros «caché-tes» (y bien «daos» además) es a la dueña, pues ciertamente nos resulta curioso el hecho de que haya tantas tías buenas con mascotas gatunas (hay que ver la de daño que hizo la historia aquella de Ricky Martin y la Nocilla).
Pero lo que está claro es que lo de algunos gatos ya roza el descaro más absoluto, y ya no es sólo que traten de aparecer disimuladamente en la foto así como el que no quiere la cosa, sino que algunos ya llegan hasta extremos de auténtico chulo-playas. Y es que una cosa es asomar un poco el hocico en medio de la foto de la dueña, y otra cosa muy distinta es ya restregarse contra ella cual osezno que se frota contra un chopo. Lo que nadie pone en duda es que este gato está ahí más feliz que la hostia (además que cuando quiera puede echarse un tiento de leche).
Pero lo que hay que reconocer es que los gatos llevan esta nueva moda hasta cotas que rozan el arte torero. Aunque bueno, lo de la siguiente foto parece más bien un perro, pero bien es cierto que se da un poco de aires gatunos. El caso es que lo importante es el hecho de ver hasta qué extremos llegan estos bichos a la hora de meterse en cualquier recoveco donde estar «agustico», pues francamente no creemos que haya sido la dueña la que se haya colocado ahí al animal ese para realzar tetamen, pues salta a la vista que ya va bien servida. Pero vamos, que si es dada a meterse animales en el escote, en Vas Tú Listo tenemos unas cuantas fieras que nos gustaría presentarla.
Sirva este post para poner en alerta a todas esas muchachas dueñas de mascotas, porque tened por descontado que vuestros gatos están ahí al acecho de pillar una buena foto en la que asomar el hocico. Así que antes de fotografiaros recordad siempre mirar hacia todos los frentes, porque un gato puede estar esperando su momento. Al menos la muchacha de esta última foto pudo pillarlo a tiempo.