El mundo Friki puede mirarse desde muchos puntos de vista, y los empresarios más avispados nos tientan de muchas maneras. Pero lo máximo en tentación, es cuando intentan que de un Friki A y un Friki B salga un Friki AB. Eso es lo que pasa, por ejemplo, cuando a los enfermos de los videojuegos los intentan transformar en jugadores de tablero o viceversa. Anteriormente lo vimos con DOOM, World of Warcraft, Starcraft y ahora con Gears of War.
La verdad es que la idea en principio puede parecer interesante y el trasfondo da para muchas opciones con las que realizar un buen juego táctico. Por ahora es un misterio que poco a poco toma forma.
Vamos a tener claro los orígenes, pues este juego no está sacado por cualquier diseñador de tres al cuarto. Gears of War: el juego de tablero ha sido creado por Corey Konieczka y el diseño gráfico es de Edge Studio. Naturalmente decir Edge es decir Fantasy Flight Games, una de las compañías de juegos de mesa más importantes del panorama actual. Por el otro lado está Edge Entertainment, una editorial española fundada en Sevilla en 1999, que ha demostrado que sabe con quié aliarse en este mundillo para ofrecer calidad en todos sus productos.
Gears of War: el juego de tablero es un juego de uno a cuatro jugadores, que tomarán el papel de soldados de la CGO y donde intentarán acabar con los Locust en siete escenarios construidos al azar.
Una nueva forma de ver a los muchachos de la CGO
Si además eres un manitas pintando miniaturas te pueden quedar tan realistas como estas.
En "ná" y menos te pinto una horda...
El lanzamiento está previsto para el 28 de octubre y no hay nada como un vídeo para introducirnos en el juego.
Más noticias en breve…
Pues tiene buena pinta, oye. Pero me da a mi que terminaría jugando sólo… y eso es muuuuy triste.
Pues si, eso es triste, aunque sólo necesites a uno, algunas veces no lo encuentras ni debajo de las piedras. Bueno, creo que para otra vez hablaré sobre juegos de mesa de un jugador.
Yo con mi Parkinson lo de pintar figuritas casi que no…
Pero a darle al juego de tablero sí que me lanzaba por bulerías