El siempre discrepante Mr. Grifter acompañado de un servidor y un tercero en discordia, acudimos este pasado viernes 30 de Agosto al estreno de la esperada secuela de «Kick-ass». Hubiera preferido ponerme mi máscara y salir a patrullar las calles junto a Hit Girl, menuda diferencia de plan, pero me tuve que contentar con este otro. Pasa la página si quieres saber más sobre la secuela del pateador de culos.
Antes de seguir advertiré a quienes no hayan visto la primera parte que les destriparé partes importantes de la trama, ya que ambas películas están conectadas y explicar la segunda requiere de hacer un breve resumen de la anterior. Hecha la advertencia, tras haber sido aconsejado por Kiko, alias anti-spoilers, vamos al meollo.
Después de la muerte de su padre Frank D’Amico, a manos de Kick-ass, Chris planea vengarse y para ello abandona su identidad de superhéroe como Bruma Roja transformándose en el primer supervillano conocido: el Hijo Puta.
Por su parte, Dave decide ir un paso más allá en su lucha contra el crimen como Kick-ass, e intentará crear un grupo de superhéroes, inicialmente tratando de convencer a Mindy (Hit Girl), y tras su negativa contactará con otros vigilantes que comparten su idea. Así conocerá al Coronel Barras y Estrellas, un antiguo matón de la mafia que se ha pasado a este lado de la ley, quien liderará el grupo llamado «Justicia para siempre».
Mindy abandonará su identidad como vigilante ante la presión y preocupación de su tutor Marcus, quien se ha ocupado de ella tras la muerte de su padre, el superhéroe conocido como Big Daddy. No obstante, en la vida real tendrá que enfrentarse a los problemas propios de una estudiante novata en su primer año de instituto. Mientras, el Hijo Puta reclutará un ejército de delincuentes para lograr su ansiada venganza, pagados con ayuda de la inmensa fortuna que heredó de su padre.
La película, al igual que la primera parte, está basada en el cómic homónimo, que aunque un servidor no ha leído, sé que tiene muy altas dosis de violencia. Aunque no se han cortado un pelo a la hora de incluir más sangre y violencia, sí es cierto que se han autoimpuesto ciertos límites posiblemente para no ahuyentar a la audiencia más sensible, o para evitar una calificación de edad superior en el mercado estadounidense, con lo cual llegarían a menos público.
Además se han esforzado por incluir más humor gamberro, lo que en ocasiones arruina la credibilidad de la trama por lo excesivamente absurdo que es, casi ridículo. Y para muestra un botón: dos de los superhéroes que se unen a «Justicia para siempre» son un matrimonio que visten chándal azul de Adidas, y una camiseta con la foto de su hijo desaparecido. Ella utiliza como arma principal el bolso (no sabemos qué contendrá).
Y es que una de las grandes losas que he visto es el tratamiento del humor en esta entrega, menos irónico y fino que en la anterior. No han sabido encontrar el equilibrio entre la creíble historia de un adolescente que quiere ser un superhéroe en la vida real, y unos chistes a veces demasiado absurdos como para tomarse en serio nada de lo que nos están contando. Alguna excepción hay a esto, como por ejemplo el Doctor Gravedad y su barra antigravitatoria.
¿Entonces hay algo que funcione bien? Funciona Jim Carrey (Coronel Barras y Estrellas) como el líder de los superhéroes, algo más comedido que en sus habituales e histriónicos papeles. Sin ser el personaje de su vida, sabe darle cierto brío. Y por encima de todos y todas destaca Mindy alias «Hit Girl». La actriz Chloe Grace Moretz ha sabido dar vida al único superhéroe de verdad de la cinta y aún no tiene ni 18 años. Habrá que verla en próximas películas, espero que no defraude. Reparte de lo lindo: la escena sobre la furgoneta y el combate final con la supervillana «Madre Rusia» son dignas de verse. Sus coreografías en las escenas de acción están bastante cuidadas y son de lo mejor de toda la cinta. ¿Para cuando una película con ella como protagonista indiscutible?
En definitiva, puro entretenimiento que disfrutarán más los incondicionales de los vigilantes, y que podría haber sido bastante mejor pero se ha quedado a medio camino entre una película brillante de superhéroes y un subproducto con tíos en leotardos.
kick Ass 2 es la puta película del año. Por cierto, si vais al cine con colegas ansias por salir de la sala mandadlos a la mierda de mi parte y quedaros hasta el final de los créditos, porque hay una escena importante (que no os pase como a mí).
Como dirás exactamente lo mismo sobre la siguiente peli que se estrene (como siempre), pues no merece la pena discutir.
Sólo añadiré una cosa más: Hit Girl es la puta kaña de España (¿se pueden decir tacos en este estirado blog?)