Hay que reconocer que leído así en frío esto de Isla-X muchos podríais pensar que el bueno de Logan se presentó a un casting porno y le cogieron para hacer una peli erótico festiva de un menda que se pierde en una isla repleta de rubias tetonas dadas a zamparse platanitos y otras frutitas ricas del bosque. Uy pero no amiguitos, el bueno del garras sigue siendo un tipo muy decente (aunque un poco cabrón a veces) y la historia que protagoniza aquí no tiene nada que ver con argumentos de la porno del Plus, que muchos de vosotros veíais hasta codificada.
Su guionista (Bruce Jones) seguro que os suena a muchos, como por ejemplo por su laureada etapa a cargo de Hulk. El caso es que este maromazo se marcará aquí uno de esos relatos con los que trata de desorientar al lector por medio de un argumento repleto de suspense, misterio y donde las cosas no son lo que realmente parecen. Y ciertamente a lo largo de los 5 números que componen esta miniserie este guionista consigue todo ese propósito, pues hay momentos de la historia en los que ocurren cosas que te dejan más perdido que Michael Knight en un Seat Panda…
Y es que en una de sus escasas oportunidades que tienen para estar juntos, Logan y su ahijada Amiko, acuden a una inocente feria sin sospechar que dentro les espera el horror. Separada de Amiko, el mutante de las garras de adamantium tendrá que superar un extraño viaje a ninguna parte si es que quiere ver de nuevo con vida a la adolescente.
A este respecto, y para todo aquel que no conozca a Amiko Kobayashi, diremos que se trata de una niña japonesa que fue una de las víctimas de cierta catástrofe por la cual su madre consiguió protegerla con su propio cuerpo de los escombros de un edificio que se había derrumbado. Lobezno, que estaba ayudando a la población, la encontró moribunda y la madre de Amiko le hizo prometer que se ocuparía de su hija. Logan le dio su palabra y ella murió.
De esta forma, el bueno de Bruce Jones se sirve también de este personaje para crear todo ese desconcierto al que hemos aludido al principio de la reseña, el cual se contagia al lector por el hecho no saber qué coño hace de buenas a primeras Lobezno metido en esa isla, quiénes son los extraños personajes con los que allí se topa, porqué cojones ha acabado allí y cómo coño va a poder salir de ese lugar. Y si a esto le unimos también el hecho de que Jones «juega» a intercalar momentos en los que no se distingue lo que es realidad y lo que son los desvaríos de la mente de Logan, hacen de todo ello una historia un tanto desconcertante gracias a la cual conoceremos algunos de los miedos e inquietudes de este personaje.
Pero si hay algo que merece la pena destacar por encima de todo en este tomo es el dibujo de Jorge Lucas, que aunque tenga nombre de personaje del gran Chiquito de la Calzada, el tío hace gala de un estilazo con un trazo limpio y claro que es un gustazo para los sentidos (seguro que a muchos os sonará por su labor en los guiones de la colección de Mística).
En definitiva, Lobezno: Isla-X es un cómic que por momentos te deja un poco piruleta por algunas cosas que en él acontecen y que desorientan, pues provoca en ciertos instantes la misma sensación de incertidumbre que tiene el pobre Logan sobre qué narices está pasando. Y es todo ese desconcierto lo que precisamente le va dejando a uno con ganas de llegar hasta el desenlace final para saber si todo ello son devaríos de la mente de Lobi o si está siendo una vez más cobaya de los macabros jueguecitos de alguien. Así que para descubrir todo ese misterio que se esconde detrás de Isla-X deberás comprobarlo por tí mismo leyendo el tomo, ale…
Jajaja,pues no estaria mal a Lobezno en una peli calificada para mayores de edad,jajaja
Si hay un dios bueno y justo no creo que permita esas cosas.