LOS MUERTOS VIVIENTES # 9

El viernes estuve de visita en mi tienda de comics para hacerme con las compras de este mes, y tengo que decir que según entré fui como una bala hacia a los estantes de novedades de Planeta DeAgostini para coger este tomo que tanto tiempo llevamos esperando los seguidores de esta serie. Creo recordar que en el post en el que hablé del tomo anterior ya hice mención a la idea de que si me dieran a elegir sólo un comic de todas las series que sigo habitualmente, mi elección sería ésta. Y es que si uno vuelve la vista atrás y hacemos un balance de los 54 números recopilados en estos 9 tomos (que es el formato elegido para su publicación en nuesto país), la serie continúa manteniendo unos niveles de calidad acojonantemente altos. En cada post que siga haciendo sobre esta colección, creo que no me cansaré de repetir la idea de que este es uno de esos comics que enganchan, y según acabas de leer uno necesitas leer la continuación para sabe qué cojones va a ocurrir. Pasando ya a comentar un poco el tomo, vemos que la historia arranca con el protagonista (Rick Grimes) y su hijo aislados del grupo por toda esa ola vertiginosa de acontecimientos que vimos en el tomo anterior.

Si hay algo que sabe reflejar a la perfección el guionista Robert Kirkman en esta serie es la manera en la que evolucionan los personajes en un mundo sin esperanza y donde lo único que cuenta es sobrevivir día a día. De esta forma, en este tomo veremos un tremendo cambio en el carácter de Rick, pero sobre todo será el hijo de este el que irá forjando un carácter que da la sensación de que Kirkman se guarda bajo la manga uno de esos giros argumentales de los suyos que te dejan boquiabierto (estoy seguro de que en próximos números el hijo del protagonista nos va a sorprender de alguna forma como sólo Kirkman sabe hacerlo). Quiero hacer mención también a los nuevos personajes que aparecen en este tomo y la misión tan curiosa que tienen, bastante inquietantes todos ellos porque tal vez puedan ofrecer una explicación que justifique la proliferación de zombis (especial atención al personaje del Sargento Abraham, que parece que dará mucho que hablar en los próximos números).
En definitiva, una nueva entrega de esta magnífica serie en la que después de las consecuencias del tomo anterior se siguen explorando de forma magistral los recovecos más oscuros y desesperanzadores del comportamiento humano en un mundo caótico. Una serie que deberían de leer todas aquellas personas que tienen el prejuicio de pensar que los comics son historias para críos (es una pena que por tal desconocimiento del medio mucha gente se esté quedando sin leer una historia que es de lo mejorcito que el noveno arte ha dado en los últimos años).