Lunes Molones: Evil Things

En medio de la fiebre de la Eurocopa seguimos quedando para torturar nuestras débiles mentes con cualquier película que nos sugiera algún atisbo de calidad dentro del mundo del terror. No es cosa fácil, os lo aseguramos. Con la que está cayendo en España podríamos vernos algún documental en el que se explique cómo nuestros políticos se ríen de nuestros getos y nos roban impunemente mientras los demás pagamos los platos rotos. Eso sí que daría miedo, pero somos tan estúpidos que no somos capaces de ver realmente la que tenemos encima.

Menos mal que por suerte tenemos los Lunes Molones para evadirnos, echarnos unas partidas al FIFA, comer donetes a dos manos y ahora, por suerte, podemos vernos los partidos de la Eurocopa. ¿Qué cojones importa la situación española cuando la roja se está jugando la Eurocopa? Venga chavales, a ganar y a llevaros una buena prima de 300.000 boniatos mientras los demás pagamos el agujero creado por nuestros bancos.

Para mejorar el sabor agridulce del fin de semana (por el empate de España claro, lo del «rescate» a la banca española no nos preocupa, tenemos fe en nuestros adorables políticos), el Sr Grifter apalabró una película cuya portada representa de forma fehaciente el geto que ponen mis vecinas cuando se cruzan con nosotros en el portal. El nombre de tal obra magna es Evil Things.

Ojalá esta escena fuese el previo de algo subido de tono...

Evil Things nos pone en el pellejo de un grupo de amiguetes que se dirigen a pasar un agradable fin de semana a una casa rural. Durante el viaje que se pegan en coche tendrán un encontronazo con una furgoneta que les empezará a hacer la vida imposible. Lo que parecía un viaje lleno de alcohol y sexo juvenil se transforma en una pesadilla para ellos.

¡Joder mamá! ¡Te dije que no quería aparato! ¡Le hago daño a mi novio!

De unos años atrás a esta parte se han generalizado las pelis grabadas cámara en mano. Es inquietante cómo una fórmula novedosa que tuvo bastante éxito con El Proyecto de la Bruja Blair ha sido imitado infinidad de veces en películas de terror, pero pocas han conseguido pasar de un nivel mínimamente aceptable. Eso de tener pocos recursos y montarse una peli que acojone o al menos que dé un buen par de sustos no es tan fácil y tristemente provoca que muchas cintas como Evil Things se peguen una ostia importante cuando salen a la luz.

Para una escena de ducha que hay es de un tío. A TOMAR POR CULO.

Si ya el comienzo es aburrido hasta decir basta (se tiran una hora de metraje sin que suceda absolutamente nada), cuando llega la parte interesante no provoca ni un poquito de agobio, estrés o susto previsible que nos haga saltar de la silla. El recurso de cámara en mano tampoco es que haya sido utilizado inteligentemente, dado que es complicado usarlo hábilmente cuando no pasa absolutamente nada.

Y como hoy estoy vago de cojones no diré mucho más, porque sinceramente es uno de los bodrios más grandes que hemos visto en los últimos tiempos. No deberíais acercaros a ella ni con un palo.