Como todos los lunes los pringaetes de Vas Tú Listo quedamos ayer para comernos unos callos bien calentitos. Ahora que estamos en plena operación bikini pensamos que la mejor forma de sudar es la de comerse un buen plato calentito para entrar en calor y quemar todas esas calorías que nos están transformando poco a poco en verdaderos Orcos de Mordor. Repetimos con nuestro último «guest starring», el Sr Boby, el cual apareció con su sombrero de paja y su característica espiga en la boca, a lo Lucky Luke.
Después de jugar un rato a pasarnos el hielo unos a otros nos dispusimos a echarnos unos vicietes al FIFA 11. Se nota que vamos mejorando poco a poco, ahora marcamos goles y todo. Tuvimos algún que otro pufazo que tarde o temprano aparecerá por aquí para goce nuestro y escarnio publico del Sr Grifter.
Un rato machacando botones y reforzando los callos de los pulgares y nos dispusimos a ver la recomendación semanal del Sr Grifter, el cual presumía de que íbamos a pasar más miedo que los miembros de una guardería con la visita del Duque de Feria. La película de este lunes se hacía llamar: The Tunnel.
Durante el año 2007 el gobierno de Nueva Gales decide poner en marcha un proyecto por el cual se usarían unos túneles de la segunda guerra mundial para el transporte de agua. Durante la preparación y estudio de viabilidad de dicho proyecto se descubrio que los túneles, totalmente abandonados en la actualidad, eran utilizados como cobijo por vagabundos y personas sin techo. Esto ocasionó serios problemas para la aprobación del proyecto y al final se decidió su anulación debido a rumores de que algunos de estos habitantes habían desaparecido en su interior por causas desconocidas. Es aquí donde entran nuestros protagonistas, un grupo de periodistas que deciden colarse para investigar qué es lo que pasa allí. Lo que se encontrarán en los túneles les hará pasar un mal rato… muy mal rato.
El Sr Grifter ya nos avisó que el comienzo era un poco soporífero y lo cierto es que no le faltaba razón. Todo el film está rodado como si fuera un documental del Canal de Historia donde los protagonistas hablan de unos hechos sucedidos con anterioridad, y cada cierto tiempo se intercalan imágenes de lo que ellos grabaron durante su estancia en los túneles. La primera media hora es un pequeño pufillo donde se nos describe el proyecto en marcha y el por qué todo se va al carajo. Pero por suerte todo empieza a resultar interesante cuando el grupo de periodistas se cuelan en los túneles.
Poco a poco los miembros de la expedición se darán cuenta de que algo raro pasa en los túneles y muy a pesar suyo descubrirán que no están solos en la oscuridad. Ataviados únicamente con la luz que les proporciona la cámara con la que graban, los pobres reporteros tendrán que lidiar con las sombras y lo que allí les aguarda. Para ellos será primordial la luz, ya que de otra forma quedarían a oscuras, perdidos y en la más absoluta desorientación.
Como podréis suponer, toda la parte de los túneles está grabada cámara en mano, muy al estilo que hizo popular El Proyecto de La Bruja de Blair. Esto nos meterá en la piel de los protagonistas y nos contagiará durante todo el metraje de la angustia de los pasillos angostos con los que cuenta dicho complejo de túneles. Como es habitual, la película jugará con nosotros mostrando lo mínimo posible para que nos entre la canguela ante cualquier movimiento brusco o ruido en momentos clave. Yo tengo que reconocer que ésta es una de las pocas películas que me han tenido angustiado casi de principio a fin (sin contar el comienzo que os comentaba antes) y me hizo pegar algún que otro buen bote en el sillón (soy muy hombre, si no me habría abrazado a alguno de estos dos como un koala).
En definitiva, una película muy recomendable que juega muy bien sus cartas para provocarnos una sensación de angustia casi constante y algún que otro susto que nos cortará la respiración. Si te acojonan las pelis cámara en mano, con poca iluminación y con persecuciones que no dejan ver un pijo, ésta es tu película. A mí me ha gustado.