Si bueno, para lazos que atan los lacitos esos que se hace un coleguilla nuestro atándose un hilito en el dedo para acordarse de todas las cosas que tiene que hacer debido al hecho de que mezclar porros con bollycao a la hora de la merienda le ha dejado las neuronas un poco machacadas. Pero hoy no queremos hablaros de las curiosas técnicas recordatorias de este chiquillo, sino sobre un tomo al que le tenía unas ganitas locas cuando salió hará como cosa de un par de mesecitos y que en ningún momento dudé en hacerme con él como tío castizo que soy…
Todo aquel que me conoce un poco es sabedor del hecho de que, además de que estoy un poquito gili, me declaro gran fan de Los Vengadores y del formato Marvel Gold. Debido a ello, cada vez que sale uno de estos tomos con material recopilatorio de los vengatas rompo mi hucha del cerdito y salgo raudo hasta la tienda como alma que lleva el diablo. Además que es un material que tenía muchas ganas de que saliera en este formato, pues aquí donde me tenéis me declaro gran fan incondicional de este grupo de Vengadores que hizo las delicias de muchos frikazos allá por los años 80. Así que veamos porqué tenía tanta ansia en hacerme con este tomo, chavales…
La razón principal por la que tenía muchas ganas de que este tomo entrara a formar parte de mi comicteca es por el gran cariño que tengo a estos personajes (y me voy a explicar). Corría el año 1990, cuando yo aún era un tierno infante al que las vecinas le tiraban de los mofletillos, cuando gracias a un colega del cole empecé a interesarme por los cómics de Marvel. Así que tras unos cuantos meses de que este chiquillo me dejara cómics sobre personajes de esta editorial, un buen día decidí jugármela y comprarme yo algún tebeo de alguno de ellos (algo totalmente inusual por aquel entonces, pues en aquellos tiempos sólo había comprado algunos Mortadelo y algún Superlópez). El caso es que llegué al Kiosco y decidí elegir un retapado de aquellos que contenía cinco números de Los Nuevos Vengadores. Fue llegar a casa, sentarme en la terraza a degustarlo y pasármelo pipa leyendo las andanzas de estos personajes.
Cuando tu equipo pierde y encima lo están humillando
Por todo lo comentado tenía esas ganas locas de hacerme con este primer Marvel Gold en el que da comienzo la recopilación de la serie regular de Los Vengadores Costa Oeste (antaño conocidos como Los Nuevos Vengadores). Nos vamos a encontrar a personajes tan variopintos como Ojo de Halcón, su esposa Pájaro Burlón, el Hombre Maravilla, Tigra e Iron Man, quienes se han establecido en la soleada California, dando lugar a un nuevo equipo de Vengadores y con una enorme cola de enemigos listos para acabar con ellos.
El Hombre Maravilla arrimando cebolleta
Dejando a un lado el hecho de si estas historias han envejecido mejor o peor (no tan mal como otros cómics de la época), insisto nuevamente en el hecho de que yo personalmente guardo un gran cariño hacia estos personajes y disfruto enormemente las aventuras que nos vamos a encontrar a lo largo de este tomo, como las dificultades implícitas al hecho de poner en marcha un grupo totalmente nuevo, las interacciones entre algunos de sus protagonistas, la búsqueda de un componente más para llegar a ser seis miembros o las preocupaciones del pobre Ojo de Halcón en convertirse en un buen líder y no tener que depender en ningún momento de la ayuda del grupo de Vengadores de la Costa Este.
Reuniones castizas
Todo ello aderezado por el dibujo de Al Milgrom con su peculiar estilo al que muchos acusan de ser simplista, mediocre o de trazo rígido y poco elaborado. Vale que el tío no era ningún Da Vinci de las viñetas, pero al menos era cumplidor y desde luego que hay dibujantes de aquella época mucho peores, coñe.
Tigra luciendo tipín
En definitiva, Marvel Gold. Los Vengadores Costa Oeste: Los lazos que atan es un cómic con el que yo me lo he pasado como un enano. Un tomo recomendado encarecidamente para todos aquellos amantes de las historias ochenteras con guiones un tanto simples y con la única pretensión de entretener. Pues ale, en mi próxima visita a la tienda me pillo sin falta el segundo tomo que acaba de salir hace nada, chavales…
Uno de los tomos que me estoy zampando este febrero junto al Daredevil de Marvel Saga
¡Qué calidad los Marvel Saga, macho!. Fíjate que ya tenía ese material del primer tomo de Daredevil en dos formatos distintos y no pude resistirme a pillarlo, ja, ja.
Totalmente tio,ahora mismo le estoy pegando al Daredevil de Smith y Quesada y de ahí sale reseña para la pagina! Prepararse que el Predicador ta’ de vuelta! jajaja
A mí esa historia de El Hijo del Diablo me encantó. Además soy fan del dibujo de Quesada (hasta el Mefistazo no me pareció tan malo debido a que lo dibujaba él).