Las quinceañeras desquiciadas y los muchachos de hechuras sarasas al leer esto de Elric se habrán frotado las manitas pensando que en el post de hoy vamos a hablar sobre Elric-que Iglesias. Pero no amiguitos, el Elric al que nosotros nos referimos no tiene nada que ver con ese buen mozo cuyas tonadillas suenan como si estuvieran aporreando a un criajo con un gato. Se trata de una novedad de la editorial Panini que salió a la venta el mes pasado y sobre la que estoy planteándome muy seriamente el meterla en mi lista de la compra de noviembre…
A modo de culturilla general (por si algún día jugáis al Trivial u os da por ir a concursar a Saber y Ganar para conocer a Jordi Hurtado), os diremos que Elric de Melniboné es el antihéroe de una serie de libros de espada y hechicería creado por Michael Moorcock. Su primera aparición fue en el relato The Dreaming City publicado en la revista pulp Science Fantasy en junio de 1961; pero su primera aparición en una novela fue en Elric de Melniboné, en 1973. Es uno de los antihéroes más populares de la literatura fantástica siendo adaptado en varios cómics y juegos de rol. Pues bien, ya está a la venta un tomo que reinventa toda la imaginería de Elric, en un ambicioso proyecto en el que también figuran dos de las más importantes creaciones de Moorcock: Corum y Dorian Hawkmoon.
Hay que decir que Elric ha sido una fuente fundamental de inspiración para los mejores autores del cómic, desde Roy Thomas a Neil Gaiman, pasando por Warren Ellis. Ahora es el turno de Chris Robertson, quien en este tomo nos meterá de lleno en todo ese peculiar mundo de magia que rodea a este curioso personaje. Así que si como buen friki que eres aparte de no codearte con chavalas tampoco te has codeado nunca con ninguna aventura de Elric quizás este sea un buen momento para ponerlo remedio (a lo de las chavalas también). Así que ya sabes lo que toca…