Tengo que reconocer que los juegos de temática post-apocalíptica son bastante de mi agrado desde que jugué a esa tremenda pequeña joya de PC llamada Stalker: Shadow of Chernobyl. A colación de esto he de confesar que a estas alturas un jugón como yo aún no ha catado el Fallout 3, pero la razón de ello es que el bueno de Kiko me ha quitado la ilusión de comprarlo por sus comentarios tan explícitos sobre él. Pero volviendo a la reseña que nos ocupa, he de comentar que Metro 2033 se trata de uno de esos juegos que pasa inadvertido sin pena ni gloria y mucha gente no sabe lo que se pierde.
Personalmente yo le tenía echado el ojo desde hace ya tiempo en las páginas de juegos de U.K. en las que hago mis compras. Pero lamentablemente la versión que se puede adquirir en esas webs no está traducido al castellano, así que he estado esperando a que se pusiera de oferta en nuestro país. Pues bien, hace unos días me hice con él y os puedo decir que lo estoy disfrutando de lo lindo.
Sobre su argumento no entraré a comentar gran cosa, pues creo que basta con decir que se desarrolla en un futuro poco esperanzador en el que la civilización se ha ido a la mierda y en la superficie sólo queda podredumbre, cenizas y ruinas. La mayoría de los supervivientes están refugiados bajo tierra cobijados en los túneles de metro, pues francamente la vida en la superficie es practicamente imposible. La trama nos pone en el pellejo de un joven ruso llamado Artyom, quien debido a una serie de acontecimientos que iremos presenciando al inicio de la aventura se verá obligado a dejar la «comodidad» del refugio y emprender un peligroso periplo al exterior.
A partir de aquí nos metemos de lleno en este shooter en 1ª persona ambientado en un mundo desesperanzador y lleno de peligros. Supongo que al leer esto muchos estaréis pensando: «¡Bueh, el típico shooter en el que habrá que ir avanzando pegando tiros como locos a todo lo que se mueva!». Pues a este respecto he de comentar que la esencia de Metro 2033 dista bastante de ir avanzando derrochando balas como locos. Y es que, tal y como acabo de comentar, nos encontramos en un mundo decadente en el que la sensación de precariedad y escasez está presente a cada momento (y esto es aplicable sobre todo a la munición de la que dispondremos). Aquí cada bala cuenta y habrá momentos en los que será preferible ahorrar munición y no derrocharla a lo loco. Además hay que comentar también el hecho de que abundarán los momentos de «sigilo» en los que deberemos avanzar sin llamar la atención y acabando con los enemigos cogiéndolos distraídos o por la espalda, lo cual contribuye a alejar también a este juego del concepto de «shooter a lo loco».
Mención especial merece su magnífica ambientación tanto en las fases que se desarrollan en escenarios al aire libre (donde deberemos echar mano de nuestra querida máscara de gas para no intoxicarnos) como las que tienen lugar en los túneles del metro. Sin duda alguna, son estas últimas donde la tensión está más conseguida, con esos magníficos contrastes de luces y sombras aderezados por todo tipo de ruidos y gruñidos extraños que nos mantienen con el ojo avizor ante el hecho de por dónde nos puede aparecer una horda de mutantes feos y asquerosos.
A pesar de todos estos detalles positivos, hay quien critica a Metro 2033 por ser un juego excesivamente lineal y sin posibilidad de poder recorrer a nuestro antojo este devastado mundo (tal y como se podía hacer en Stalker). Sin embargo, en mi humilde opinión, creo que esta linealidad tiene cierta «razón de ser» y encaja en el argumento del juego, pues a lo largo de la aventura nuestro protagonista irá conociendo a ciertos personajes a los que nos uniremos por momentos y que son mejores conocedores del terreno que nosotros, motivo por el cual habrá que dejarse guiar por donde ellos nos lleven. Para los jugones que sean más dados a explorar escenarios a sus anchas esto no será ningún consuelo, pero lo que sí hay que reconocer es que esa linealidad tiene su razón de ser en la aventura en el sentido de que si nosotros estuviéramos en el pellejo del protagonista también iríamos buscando el poder unirnos a gente que conociera el terreno mejor que nosotros antes que explorarlo a nuestras anchas y acabar metiéndonos en un lugar peligroso en el que nos convirtamos en la merienda de algún mutante.
En definitiva, Metro 2033 pasó en su día bastante desapercibido por muchos y realmente es un juego que nos mantendrá enganchados durante muchas horas. Además hay que destacar su magnífico doblaje a nuestro idioma y una tremenda jugabilidad que te hacen no dejarlo hasta llegar al final. Personalmente lo recomiendo a todos los jugones porque por el precio de oferta al que le han puesto ahora es una magnífica compra.
Tengo que puntualizar que mis críticas negativas a Fallout3 son porque se me bloqueaba mi versión de XBOX360. Parece ser que mi partida guardada se volvió corrupta y era imposible avanzar desde ahí.
El juego me lo terminé comprando estas últimas Navidades en PC a través de Steam, así que volveré a darle otra oportunidad cuando tenga un rato, porque tiene unas críticas excelentes.
Este no lo he probado, no me termina de «llamar», pero jugue al Stalker que me encanto, aunque en mi PC no tiraba del todo y por eso lo deje de lado, pero al Fallout3, le he echado horas y horas, un JUEGAZO. No pierdas la oprtunidad de probar la version GOTY. Y ya que estramos tambien el Borderlands, que no esta nada mal.
Pues si te gustó Stalker yo creo que Metro 2033 te puede molar.
Sobre el Borderlands nos lo estamos pasando entre Kiko y yo en modo cooperativo en la Xbox. Ahora estamos enfrascados en la expansión esa de la Isla Zombie.