Madre mía chavales, no os podéis imaginar la pedazo de pechá que me pegué anoche a ver esto de la WWE. Las personas que al igual que yo se hayan reenganchado nuevamente al Pressing Catch serían sabedores de que hace unos días tuvo lugar el evento conocido como la Royal Rumble. Para el que no lo sepa diré que es una lucha conocida como «la batalla real» en la que el ganador es el último luchador que queda en el ring después de que todos los demás hayan entrado y hayan sido eliminados (sacados fuera de él por encima de la 3ª cuerda). La verdad es que para cualquier persona que le guste la WWE es un espectáculo la mar de entretenido, por el simple hecho de ver a 40 mendas, que iban entrando paulatinamente cada poco tiempo, dándose de hostias hasta que sólo queda uno en el ring. Tres putas horazas de reloj viendo esto de la Royal Rumble, y que al final de la misma me dejaron unas ganas locas de lanzar a alguien en volandas y mandarlo por ahí a tomar por culo. Así que debido al buen sabor de boca que me dejó el evento y a lo bien que me lo pasé viéndolo, me gustaría dedicar un post a esto de la WWE, concretamente al temazo musical que sirve de apertura al programa Raw, y que me parece una de las mejores canciones que he escuchado últimamente.
¿Mola el ritmazo que tiene, eh?. Por lo que he investigado se trata de un temazo del grupo Nickelback, que lleva por título Burn it to the ground. Tal y como he dicho antes, es actualmente la canción oficial con la que se abre el programa de Raw, y le deja a uno con unas ganas locas de mover el esqueletamen que «pa qué». Así que sirva este post como homenaje al Royal Rumble que me tragué ayer y cuyo visionado recomiendo a todo el que siga en Marca Tv los programas de Smackdown y Raw.