Hace ya unos cuantos meses la editorial Panini puso a la venta un tomo que venía a ser una precuela de este juego del que me gustaría hablar hoy. Tengo que reconocer que en su día ese cómic me llamó la atención (e incluso llegué a sostenerlo en mis manos en la tienda con idea de pillármelo), pero finalmente no me hice con él. La verdad es que desde que vi un trailer sobre este juego en Youtube me llamó la atención por lo espectacular de las imágenes. Así que hoy he aprovechado una buena ofertacas en una de las páginas donde suelo comprar juegos y me he hecho con él por sólo 14€. Mientras me llega el pedido (seguramente llegará desde Reino Unido la semana qe viene), voy a ir abriendo boca con esta reseña comentando lo que espero de este juego. Al parecer, nos ponemos en el pellejo de Alex Mercer, un individuo que llega a la ciudad de Nueva York tras escaparse de un siniestro laboratorio donde unos científicos un poco cabronazos han estado experimentando con él.
A pesar de su amnesia, poco a poco va siendo consciente de los poderes que tiene como resultado de todos esos experimentos a los que se ha visto sometido. Quien parece estar detrás de todo ello es la corporación de bioingeniería GENTEK, en la que Alex trabajaba, razón por la cual intentará llegar hasta el fondo de todo el asunto y descubrir qué ha pasado. Por lo que me he estado documentado en críticas de gente que ya ha podido disfrutarlo, el juego es una orgía total de caos y destrucción masiva en el que hay que arrasar a lo Atila con todo lo que se ponga por delante (militares, infectados, civiles, cazadores, tanques, helicopteros, mutantes, étc…). Y es que el juego viene a ser una especie de popurrí que mezcla lo mejor de otros títulos tales como GTA o Dead Rising, e incluso Spiderman.
En definitiva, se trata de unos de esos juegos aptos para derrochar adrenalina a lo bestia y para vibrar con todos esos combates y con toda esa oleada de destrucción que el protagonista va dejando a su paso. Todo ello se ve acrecentado por las múltiples posibilidades que el juego ofrece gracias a los numerosos poderes del protagonista, que garantizan horas y horas de diversión a lo bruto. Un juego con el que supongo que disfrutarán sobre todo esos jovenzuelos de hoy día que son tan dados a destrozar cabinas o a patear cubos de basura.
En definitiva, se trata de unos de esos juegos aptos para derrochar adrenalina a lo bestia y para vibrar con todos esos combates y con toda esa oleada de destrucción que el protagonista va dejando a su paso. Todo ello se ve acrecentado por las múltiples posibilidades que el juego ofrece gracias a los numerosos poderes del protagonista, que garantizan horas y horas de diversión a lo bruto. Un juego con el que supongo que disfrutarán sobre todo esos jovenzuelos de hoy día que son tan dados a destrozar cabinas o a patear cubos de basura.
Yo también me lo he pillado. A ver cuando llega!
Es que por 14€ anda que no merece la pena un juego de repartir hostias de esta forma tremebunda.