Para el que tenga aún menos mundillo en el idioma de Shakespeare que el Príncipe Gitano cantando In The Ghetto diremos que esto de Stitched viene a significar algo así como Cosido, por lo que muchos podréis pensar que este cómic va a tratar sobre niños taraos de esos que van «mu locos por la vida» se descalabran y hay que llevarlos corriendo a urgencias para que les peguen unas puntadas en la cabeza. Pero no amiguitos, el tomo al que dedicamos unas palabrejas hoy viene avalado por el nombre de Garth Ennis, del que ya hemos comentado alguna vez que este tío es algo así como el Quentin Tarantino del mundo del noveno arte…
Y es que sólo hace falta leer cosillas como Crossed, The Boys o Predicador para ser consciente de que este mozo se pirra por los argumentos irreverentes y crudos hasta el ojete. Es por ello que una vez más vuelve a demostrarlo con Stitched, pues una historia que junta a soldados americanos, Talibanes y a una especie de muertos vivientes chungos puede resultar una mezcla inquietante. Así que si no tenías ni zorra sobre la existencia de este cómic sigue leyendo…
Stitched es una especie de survival horror repleto de violencia y acción, en el que el género bélico y el terror se dan la mano. Tres soldados americanos, supervivientes de un accidente de helicóptero en Afganistán, tratan de sobrevivir en unas montañas controladas por los Talibanes. Heridos, sin comida, sin agua y sin medicinas, pronto descubrirán que hay algo peor todavía que el enemigo: un poder sobrenatural, asesino e imparable. Mientras esperan un rescate que nunca llega, deberán escapar de una jauría de no-muertos controlados por una mente tan inteligente como malvada.
Ciertamente el argumento de Stitched puede parecer el de la típica peli chunga de serie B de turno, pues por si no lo sabíais, el bueno de Ennis lo concibió para un cortometraje escrito y dirigido por él mismo. Por cierto, aparte de los elementos sobrenaturales y de magia negra que rezuma la historia con esos muertos vivientes capaces de destrozarte en poco segundos, el argumento toca también el peliagudo tema del esclavismo y la manera en la que algunas personas tratan de enriquecerse y de sacar partido de la miseria y las calamidades de los más desavorecidos en una zona de guerra.
Por cierto, merece la pena comentar que no todo en el cómic es violencia explícita «made in Ennis», pues a lo largo de la historia uno va empatizando con los protagonistas, con esas caracterizaciones que se nos va haciendo de cada uno de ellos. Destaca ante todo la evolución del personaje de la joven soldado de 19 años, por esa manera en la que pasa de ser una niña asustadiza a una mujer hecha y derecha capaz de enfrentarse a sus propios miedos y temores cuando la situación lo requiere. No faltarán tampoco los lazos de camaradería que se van forjando entre todos ellos en medio de un contexto en el que han de mantenerse unidos si quieren sobrevivir.
Mención especial merece el dibujo de Mike Wolfer, un menda ya muy acostumbrado a plasmar vísceras y sangre por sus pinitos en alguna que otra historia de zombies. Quizás tenga un estilo demasiado limpio y claro para una historia de estas caracteristicas, pero bien es cierto que sirve para reflejar con gran detallismo las barrabasadas que tanto le gusta plasmar a Ennis en sus guiones.
En definitiva, si eres uno de esos fans irredentos del insigne irlandés y te pirras por sus historias de acción pura y dura, violencia, sangre y desmembraciones con ese puntito bélico que tanto le gusta, entonces te molará Stitched. Y si eres un poco vaguete y prefieres «ver a leer», echa un vistazo al cortometraje al que hemos aludido antes, para que veas lo putas que lo pasan los protagonistas rodeados a casi cada instante por esos seres putrefactos.