Si bueno, para lazos que atan los lacitos esos que se hace un coleguilla nuestro atándose un hilito en el dedo para acordarse de todas las cosas que tiene que hacer debido al hecho de que mezclar porros con bollycao a la hora de la merienda le ha dejado las neuronas un poco machacadas. Pero hoy no queremos hablaros de las curiosas técnicas recordatorias de este chiquillo, sino sobre un tomo al que le tenía unas ganitas locas cuando salió hará como cosa de un par de mesecitos y que en ningún momento dudé en hacerme con él como tío castizo que soy…
Todo aquel que me conoce un poco es sabedor del hecho de que, además de que estoy un poquito gili, me declaro gran fan de Los Vengadores y del formato Marvel Gold. Debido a ello, cada vez que sale uno de estos tomos con material recopilatorio de los vengatas rompo mi hucha del cerdito y salgo raudo hasta la tienda como alma que lleva el diablo. Además que es un material que tenía muchas ganas de que saliera en este formato, pues aquí donde me tenéis me declaro gran fan incondicional de este grupo de Vengadores que hizo las delicias de muchos frikazos allá por los años 80. Así que veamos porqué tenía tanta ansia en hacerme con este tomo, chavales…