Ya comenté en otro post anterior que gran parte del presupuesto mensual que destinaba a Panini y a ECC lo estoy usando para pillar cosas de otras editoriales con publicaciones de calidad a precios asequibles y que no pretenden sacarte los dineros a manos llenas. Es por ello que este mes ha caído este cómic de la editorial La Cúpula, que siempre me había llamado la atención y que mucha gente me había recomendado para partirte la caja un rato con la cantidad de mongoladas que uno se puede encontrar a lo largo de él. Y tras haberlo leído recientemente he de confesar que tiene algunos momentazos para partirse el ojete…