Antes de haber visto esta película, mis conocimientos sobre Green Hornet eran bastante pírricos. La única noción que tenía era la de aquella antigua serie de televisión de los años 60 en la que salía Bruce Lee (que por cierto, hay un pequeño guiño hacia él en la película). Además este escaso bagaje me sonaba solamente de oídas, porque en la vida he visto ningún episodio de la mencionada serie. Así que cuando estrenaron esta película me llamaba la atención para conocer un poco más al personaje. Aunque he de reconocer que el subconsciente me tiraba un poco para atrás, debido al parecido del «Avispón Verde» con el protagonista de aquel pufo titulado The Spirit, y francamente todo lo que pueda recordarme a ese film me dan ganas de sacar un crucifijo y entonar la frase de «vade retro, Satanás».
Sin embargo, Green Hornet no es ni mucho menos tan mala como aquella, pues sin ser un peliculón al menos no te queda la rara sensación de que lo que acabas de ver te ha quitado años de vida (pues realmente a mí The Spirit me quitó un par de ellos, y encima me dejó tan tocado que me provocó que saliera de la sala «haciendo eses»).