Sí bueno, para pedazo de gravedad profunda la de un cacho gilipollón de aquí del barrio, que haciendo el mongolo con el monopatín se metió tal ostia que casi tuvieron que recogerle con pinzas para poder llevarle hasta su casa. Pero no, mis queridos amiguitos, hoy no vamos a hablar sobre Tony Hawk’s de andar por casa, sino sobre cierta novedad comiquera que salió hace unas pocas semanas y puede ser del agrado de los amantes de la ciencia-ficción.
Los que sigáis estas reseñas mierderas seguramente os acordaréis que hace ya unas poquitas semanas comenté que Medusa Cómics es un nuevo sello de reciente aparición, perteneciente a la Editorial Hidra, que hizo su debut hace unos cuantos mesecillos con títulos tales como The Woods, God is Dead, Colder y este tomo que hemos tenido el placer de catar y que nos ha convencido bastante. Así que si eres dado a las historias de terror en el espacio, donde aunque chilles como una puta locaza o como una verdulera de Tele5 nadie podrá escuchar tus gritos, permanece atento a lo que nos trae este cómic…