Cuando hace unos días el nunca bien ponderado Kiko me propuso dejarnos caer por este evento me lo dijo mientras se zampaba un bocata de nocilla ahí con la bocaza llena, y claro yo le entendí Gayfest. Como es de suponer, le respondí que antes muerto, «pisoteao» y «enterrao» que ir a una movida chunga de esas. Una vez que el tío masticó el trozo de bocata y volvió a vocalizar como dios manda, me aclaró que no era el Gayfest sino el Gamefest y entonces yo ya pude respirar tranquilo. El caso es que ayer y hoy los muchachos de Vas Tú Listo hemos estado en esta feria del videojuego para cubrir el evento, y la principal conclusión que hemos extraído es que debería haberse llamado Game-Feost, porque estaba repleto hasta el ojete de criajos frikis de esos que se enganchan a una consola y se quedan pegados a ella sin soltarla como si fueran conejos follando, no me jodas. Más de una vez daban ganas de pegar un tremendo collejón a alguno de ellos y decirle: «Pero chaval, suelta ya el puto mando y deja de acaparar vicio, joder».