La verdad es que con la gran proliferación que hay últimamente de cómics como Crossed o de los tomos de zombies que está publicando la editorial Glenat voy a acabar más gilipollas de lo que estoy. Y es que tengo que reconocer que he entrado en una peculiar dinámica por la cual en mis últimas y más recientes compras mensuales siempre anda de por medio algún que otro cómic protagonizado por esos entrañables seres putrefactos o por los infectados de Crossed. Y mi última adquisición ha sido este tomo al cual dedico la reseña de hoy, con una nueva historia en la que David Lapham parece que le ha cogido el gustillo a esta serie.
Así que tras haber degustado los otros dos tomos publicados hasta la fecha, qué menos que dar una oportunidad a esta nueva entrega y leer las idas de olla de las que suele hacer gala esta colección. Sobre su argumento, veremos una vez más lo que viene siendo lo habitual en las historias de Crossed: un grupo de supervivientes tratando de hacer lo posible por no caer en las manos de los infectados y evitar así una muerte atroz y a lo bestia.