Los lectores más ancianos del lugar recordaréis que hace ya unos cuantos meses hicimos desde este mismo blog una cruda denuncia al deplorable comportamiento de ciertos afamados personajes de la Disney en este post y en este otro. Pues bien, nuevamente hemos puesto a trabajar a nuestro equipo de reporteros para que indagaran sobre otros personajes de Disney y ver qué se traían entre manos. Tras haber recabado datos e información, sólo os podemos decir que si lo del puto Donald rozaba la «taradez» supina, poco tienen que envidiarle otros personajes que van también de buenecitos y de no haber roto un plato en su vida y luego resulta que están más salidos que una lesbiana ciega en una pescadería.