Han pasado ya casi diez añitos, una década de nada desde que LOST (Perdidos) irrumpía en nuestras teles a golpe de SyFy y aventuras para tenernos enganchados horas tras horas. De ese conjunto de actores siempre guardaré en mi corazón a Evangeline Lilly (Kate), que con aquellos ojitos nos volvía locos y que años después se ha convertido en una elfa de lo más «aventurera» (lo dejaré ahí) en el Hobbit.
«El Hobbit» en cómic
Los más sarasas dirán que no hay nada como un buen abanico para combatir el calor, pero yo personalmente suelo sobrellevarlo mejor con un batido bien fresquito de los de la Hello Kitty (de fresa, por supuesto). El caso es que estaba ya ahí sorbiendo de forma canallesca los últimos centilitros de mi rico batidazo cuando echando un vistazo al catálogo de novedades de Norma Editorial para este próximo mes de septiembre me he topado con una que me ha dejado más burraco que al taburete de Sharon Stone…
Vacaciones en la frontera
Como un Hobbit de la comarca me dispongo a pasear por la fina línea que me separa de Mordor (y es que los pirineos es lo que tienen, son lugares entre un lado y otro). Pues bien, hay un sitio en la frontera que es digno de visitar, la Vall d’aran, un lugar donde todo parece mucho más verde.
Las vacaciones las prefiero hacer en septiembre, pero aunque sea el último en irme, todo se acaba. Sin duda la vuelta es dura, y si regresas de un lugar donde el gris de la ciudad se transforma en verde, el reencuentro con la dura realidad es mucho peor. Entre tanto bosque, algunas veces me da por visitar algún pueblo masificado. Los pueblos fronterizos con nuestro país vecino del norte son de lo más curioso, y el caso de Bossòst es digno de estudio sociológico.