Immortals

Tal y como le comentaba ayer a una coleguita, si te consideras un friki de pura cepa y no acudes a ver este tipo de films el mismo día del estreno te expones a que la gente te señale con el dedo cuando vayas por la calle y se te queden mirando diciendo: «¡Hey mirad, por ahí va el gilipichis ese que no fue a ver Immortals el día del estreno!». Y como en este blog no queremos que nos pase eso ni por asomo, qué menos que acudir en tropel a presenciar la que por su trailer apuntaba maneras de ser una de las pelis del año.

He de confesar que yo personalmente tenía grandes esperanzas puestas en este largometraje (hasta hice una cuenta atrás en mi nick del messenger contando los días que quedaban para el día de su estreno). Incluso metí presión a muchas amistades descarriadas que no tenían ni zorra idea de la existencia de este film, hablándoles de Immortals de una manera en la que uno podría pensar que tengo acciones en ella o que soy el ahijado secreto del director (el cineasta indio Tarsem Singh, por cierto). Pues bien, tras haber visionado esta película he de reconocer que la cosa tampoco era para tanto…