¿Quién no ha jugado alguna vez al famoso jueguecito de hundir la flota?. Yo he de reconocer que era más dado a jugar a esa variante ratonesca consistente en doblar un papelito por la mitad, dibujar muñecajos en cada una de las partes de la hoja y luego jugar con la otra persona a hacer puntitos con el papel doblado para acertar en los muñecos del otro (siempre era un regocijo muy serio el hecho de acertar en los huevos a alguno de los dibujos del contrincante y cachondearte de él en su cara).
El caso es que como buenos frikis que somos en este blog, cuando nos enteramos de que esta película iba a ser una adaptación en cine de ese más que popular juego de mesa de Hasbro (la misma compañía que creó a los míticos Transformers), no pudimos menos que ataviarnos con nuestro frac que solemos usar para colarnos en bodas de gente a la que no hemos visto en la puta vida y poder comer de gorra. Sirva esta reseña para comentar qué nos ha parecido este film sobre una nueva amenaza alienígena capaz de acabar con los insignificantes humanos en un santiamén…