Cuando decidimos montar este blog hace ya más de 4 años después de una noche de lujuria, desenfreno y porros a tutiplén, nuestra motivación principal no sólo era la de compartir con todos vosotros nuestras inquietudes más frikis, sino también poder explayarnos a gusto sobre cualquier tema digno de mención. Así que para todos aquellos que cuando nos ven por la calle nos gritan «feos» y nos increpan por hablar sólo de pelis, videojuegos y de cómics, hoy queremos dedicarles este post tan crítico contra un mal que sigue aquejando a la humanidad: los osos guarrosos.
Tortolitos futuristas
Hay mucha gente que dice que los muchachos de este blog somos unos sosos y unos secos de cojones y que lo más romántico que hemos hecho ha sido el navegar por rasuradas.com a la luz de unas velas. Y es que son muchos los que piensan que sólo nos gustan las pelis de hostias a lo Bud Spencer y los videojuegos de reventar cabezas tipo Call of Duty. A todos estos detractores que nos critican también diciendo que sólo lloramos cuando nos pegan un balonazo en los huevos y que tenemos menos corazoncito que el hombre de hojalata del Mago de Oz, les diremos que también tenemos nuestro lado tierno a lo nuevo pan Bimbo sin corteza y que de vez en cuando nos ponemos melosones con voz a lo Sarita Montiel si la situación lo requiere. Por eso hoy os queremos hablar sobre este peculiar cómic sobre los dos tórtolos más famosos de la literatura universal.