Otra de las joyas que tenía por ahí en mi comicteca más perdida que las bragas de Paris Hilton (en lo más recóndito de los estantes de mis super armarios comiqueros) es este tomo titulado The Extremist, un curioso cómic cuya lectura me gustaría recomendar. El caso es que el otro día me dio por volver a leerlo y la sensación que me dejó fue la misma que cuando lo caté por primera vez: una historia que en sus primeras páginas resulta un tanto extraña y te deja un poco piruleta, pero que a medida que uno se adentra en su lectura va ganando más enteros que mi vecina del Bajo C a medida que ha ido llegando el veranito.
Se trata de una serie limitada de cuatro números perteneciente a la línea Vertigo y escrita por Peter Milligan (la verdad es que en su día me pillé este tomo por el simple hecho de que él era el guionista, porque de la historia no tenía ni la más zorra idea sobre lo que trataba). Pero insisto en que al bueno de Milligan lo tengo en un altar desde que leí sus pinitos en X-Statix y alguna que otra cosilla más que hizo para Marvel, por lo que es normal que cuando en su día me topé con este cómic en la tienda me llamara la atención…