Tiendas y comercios

En Vas Tú Listo ya demostramos no hace mucho en cierto post nuestra devoción por los nombres gilipollescos y originales. Hoy nos gustaría ir un poco más allá y cantar a los cuatro vientos que en este blog también apoyamos los nombres divertidos de tiendas, comercios, tascas, bares o cualquier lugar que se precie. Y es que ya está muy visto eso de llamar a un bar con el apellido del dueño o a una tienda con el nombre de la calle en la que se encuentra ubicada (y mariconadas de ese jaez). Así que una vez más hemos puesto a indagar a nuestro equipo de reporteros para que recorrieran el mundo en busca de comercios con nombres originales, y hay que reconocer que se han portado los chavales porque nos han traído estos que os presentamos a continuación.

El lugar ideal para iniciarse en el mundo de "las bolas"

La verdad es que el cartelito de este primer lugar tiene cojones y desde luego que se las trae por la curiosa mezcla de conceptos que hay en el nombre, ¿verdad?. Ciertamente es mejor no indagar sobre la clase de columpios que puede haber dentro de él ni el tipo de actividades que habrá de puertas para dentro (eso por no hablar de lo que entenderán aquí como «piscina de bolas»). Pero vamos, que como los críos de hoy en día saben hasta latín, uno ya no sabe ni que pensar. Desde Vas Tú Listo sólo deseamos que se haga un uso noble de las colchonetas que en este parque infantil pudiera haber.

Porque los gilis también tienen derecho a comer pollo

Si hubiera que usar una palabra para definir el nombre de esta otra tienda sería la de «retintín» (y Milú). Vamos, tampoco queda demasiado claro si esa denominación se refiere a los de la propia tienda o a sus clientes, pues suponemos que habría que conocer los precios de la misma para dilucidarlo. En cualquier caso gentío hay esperando para hacer sus compras, por lo que nos congratulamos por el exitazo de los gilipollos.

A saber qué coño servirán aquí

Lo primero que le asalta a uno a la cabeza viendo un cartel como este es preguntarse si la mujer de Goku habrá abierto una tasca. Descartada esa posibilidad uno pasa a darle vueltas a la cuestión de qué clase de «menuses» servirán en un restaurante que lleva ese nombre. Según parece, se trata de un bar especializado en pescados varios, y donde uno puede gritar alegremente: «¿A qué coño sabe esto?» (cuando la comida es una puta mierda). En cualquier caso cuando uno entra aquí a mover el hocico desea ante todo no encontrarse ningún pelo en su plato (o bueno, habrá quien sí).