Cuando los muchachos de este humilde blog no estamos borrachos o emporraos nos gusta hacer charlas coloquio sobre temas variopintos. El caso es que el otro día nos dio por elucubrar sobre cuál sería la profesión más molona. Uno decía que le molaría ser bombero torero; otro decía que lo mejor es ser portero de la Mansión Playboy o juez de concursos de camisetas mojadas o de peleas de chavalas en el barro. Sí, todas esas profesiones molan (no te digo yo que no), pero tras muchas horas de discutir y discutir hasta el punto de rabiar y pegarnos con el bolso, finalmente llegamos a la conclusión de que la mejor profesión del mundo sería ser un Stormtrooper (ahí, con dos cojones). Y vamos a demostrar con una retaila de fotos toda esta teoría de lo bien que se lo pasa esta gente.
Te lo puedes montar con las más guarras de las galaxias
Puedes establecer contacto con otras culturas
Te puedes cagar en la puta alianza rebelde
Entras en los putis «de gratis»
Puedes arrasar a lo Atila en esos mismos putis
Las chavalitas querrán hacerse fotos contigo
Conocerás más y más chavalitas
El sueldo te da «pa mazo»
Puedes vacilar a los criajos
Los veranos son de puta madre
Veranos de putísima madre, diría yo
En tus días libres te tocas los huevos
Te tocas los huevos literalmente además
Puedes conocer a alguna chavalita maja de allí de tu curro
E incluso pasar con ella por la vicaría
Y puedes tener una mascota cojonuda
Pero queridísimo lector, a veces no es oro todo lo que reluce. Y es que si por las fotos anteriores parece que ser un Stormtrooper es una profesión cojonuda, hay un pequeño detalle que puede resultar un gran inconveniente:
Cachis. Si es que no podía ser todo tan perfecto
Te falta este video de música pegadiza:
You see us marchin’ down the street,
we’re looking good in white
We got blasters in our hands,
we got you runnin’
We’re wearing helmets so you won’t see
Our happy faces underneath